Javier Poveda
Vida
Esofagitis, úlceras esofágicas, sangrado, estrecheces en esófago, y cáncer de esófago son solo algunas de las complicaciones que puede presentar una persona con reflujo, una enfermedad relativamente común que puede confundirse con gastritis o asociarse a los parásitos.
5 por ciento población en general.
5 por ciento en mayores de 55 años.
60 por ciento en obesos.
49-70 por ciento en embarazadas.
Se presenta por igual en ambos géneros, pero hay más complicaciones en hombres, explicó la doctora Mariel Mejía Rivas, del Instituto Médico Bolonia.
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“La enfermedad por reflujo gastroesofágico se refiere al reflujo del contenido gástrico o gastroduodenal hacia el esófago, lo que provoca síntomas o daño a la mucosa esofágica o extraesofágica”, explicó el doctor Juan Carlos Leytón Valle, gastroenterólogo del Instituto Médico Bolonia. Asimismo el especialista añadió que el reflujo nocturno, que es el que despierta al paciente por la noche con sensación de ahogo, tos o quemazón en la garganta “es el más peligroso porque daña más al esófago y predispone a más complicaciones”, dijo.
Más sencillamente explicado, el reflujo se da cuando el contenido del estómago o duodeno se regresa al esófago. “Esto provoca una serie de síntomas, tanto esofágico como fuera del esófago. Es decir la gente puede sentir la sensación de fuego en la garganta, sentir que se le regresa el alimento y dolor toráxico. Asimismo, tos crónica”, dijo la especialista en motilidad gastrointestinal, Mariel Mejía Rivas.
DIAGNÓSTICO
Usualmente los problemas gastrointestinales se trataban con la endoscopía, sin embargo en nuestro país hay dos nuevos tratamientos para tratar el reflujo.
El estudio de oro para el diagnóstico del reflujo es la es la pHmetría esofágica de 24 horas, que combinada con impedancia intraluminal nos ayuda a identificar si el reflujo es ácido, no ácido, líquido, de gas, sí llega hasta la parte superior del esófago y si hay relación de los síntomas del paciente con el reflujo. Asimismo la manometría esofágica es un estudio en el que se evalúa el funcionamiento motor del esófago y podemos identificar anormalidades que se asocien directamente con el reflujo del paciente y así dar tratamiento dirigido a la causa del problema, explicó el especialista del Instituto Médico Bolonia.
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