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VIDA
El pasado domingo los Rolling Stones hicieron su regreso triunfal a los escenarios en Londres, en el primero de cinco conciertos que tienen programados a fin de celebrar su cincuenta aniversario de su debut como una banda de blues al estilo estadounidense.
El grupo no mostró señales de desgaste, salvo el visible envejecimiento de sus integrantes, con rostros bastante arrugados; el vocalista Mick Jagger se contoneó y se desplazó con agilidad por el escenario, que duró dos horas y media. Y Jagger lucía bastante delgado, con buen físico, y su voz era impecable.
CERO REGLAS
El principal guitarrista Keith Richards, cuya supervivencia sorprendió a muchos que pensaron que sucumbiría a las drogas y la bebida, fue más contundente: “Lo logramos”, dijo. “Estoy feliz de verlos. Estoy feliz de verlos a todos”, exclamó Richards.
Agregó que “el grupo es famoso por no obedecer las reglas ni sucumbir a presiones, pero a lo largo del año teníamos cada vez más la sensación de que ahí fuera había tipos que cuentan con nosotros. Y no les puedes defraudar”.
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