Lucía Vargas
Desabastecidos de medicamentos básicos se encuentran los centros de salud y el hospital Amistad Japón Nicaragua, de la ciudad de Granada. A esto se suman problemas de infraestructura, déficit de camas, material de reposición periódica, personal médico y la mala atención que ofrecen algunos doctores.
Se pudo constatar que en salas de emergencias carecen hasta de guantes y gasas, así como de suero y una solución que es vital para estabilizar a pacientes que sufren accidentes de tránsito.
Otra de las debilidades es la falta de privacidad de los pacientes que permanecen aislados por el tipo de patología que padecen. Según algunos trabajadores consultados bajo anonimato, estos comparten los mismos servicios higiénicos de los demás pacientes.
Se pudo comprobar que de diez pacientes consultados, ocho dijeron haber llegado al hospital por problemas de fiebre, dolor en los ojos. Otro porcentaje presentaba malestares respiratorios. Todos dijeron que no habían recibido medicamentos.
“Me dijeron que tengo dengue, pero no me dieron las acetaminofén, tengo que comprarlas”, señaló Irene Colomer, quien explicó que ya había ido al centro de salud Sinforoso Bravo.
PERROS Y GATOS PASEAN POR EL HOSPITAL
Familiares de pacientes internos coinciden con algunos trabajadores de la salud, que el hospital sigue atestado de gatos y perros que se pasean en los pasillos y patios internos en busca de desechos de comida.
Se ha confirmado que hay ratones, cucarachas y zancudos. También dijeron que los servicios higiénicos lucen sucios y en mal estado y la comida es muy mala, tanto para el hospitalizado como para el trabajador.
LA PRENSA ha buscado en reiteradas ocasiones una entrevista con el director del Silais, Omar Malespín, para conocer su opinión, pero se ha negado a atender a este medio, igualmente la directora del hospital.
MAL DISEÑO
“Este hospital fue mal diseñado, imagínese que la sala de labor y parto está cerca de la sala de emergencia y la sala de espera de las mujeres que van a parir se ubica al final del hospital y hay que pegar carreras con las parturientas”, citó una señora que estaba acompañando a su hija que había dado a luz.
Según explicó, en el corredor donde se transita para llegar a la sala de labor y parto hay una rampa que pone en riesgo a la enfermera y a la paciente a la hora de una emergencia, porque además las sillas de rueda están muy deterioradas.
La señora dijo que pudo ver que ponen a dos pacientes en una sola cama cuando hay muchos enfermos.
El centro de salud ubicado en la zona de Palmira no escapa a la crisis del Minsa porque estaba desabastecido de medicinas, gasas y hasta de líquidos de limpieza.
Una fuente del centro comentó que hace algunos días abastecieron de medicamentos por la noche porque al día siguiente llegaba la ministra de Salud. “Pero aquí siempre estamos en crisis”, lamentó esa fuente.
Otro problema serio identificado en el hospital Japón Nicaragua es el mal estado de los cielos rasos de los quirófanos. “Estos pueden desprenderse y causar daños a los pacientes que son intervenidos quirúrgicamente”, sostuvo un trabajador.
En el departamento solo se cuenta con un hospital que está en la cabecera. Nandaime urge de un centro que tenga todos los servicios, ya que solo tiene una unidad que carece de equipos y personal calificado para atender casos graves.
Los pobladores de Nandaime —22 kilómetros de Granada— han demandado un servicio de salud más eficiente, al igual los pobladores de Malacatoya, donde se estima hay unos diez mil habitantes y deben de viajar a Granada para ser atendidos porque los médicos no llegan con regularidad al centro de salud local.
APORTE HA CRECIDO
La ministra de Salud, Sonia Castro, informó durante una visita a Granada el martes 30 de octubre, que de 29 unidades de salud que había en 2006, han logrado 31 a la fecha. Explicó que de 850 trabajadores a inicios del gobierno de Daniel Ortega, ahora cuentan con 1,009 en todo el departamento.
Castro dijo que el presupuesto asignado al departamento incrementó de 65 millones de córdobas, en 2006, a 195 millones al 2012.
En cuanto a infraestructura dijo que se ha hecho una inversión de 12.5 millones de córdobas y en equipamiento la inversión es de 15 millones, con la entrega de dos ambulancias, una unidad móvil, un ventilador, equipo de colposcopía y mamografía para el hospital.
La funcionaria citó que las alcaldías sandinistas cumplieron con el aporte del 7.5 por ciento de sus presupuestos, mientras la municipalidad de Granada, solo aporto 3.6 millones de córdobas.
Castro dijo que lo previsto para el 2013 es aportar al hospital Japón un equipo nuevo de rayos X y un ultrasonido. “También vamos ampliar la clínica médica previsional, porque estamos en deuda con los trabajadores asegurados, porque es insuficiente el espacio y la calidad de atención que se les da”, dijo.
Otra de las prioridades es trabajar coordinados con la Red Comunitaria conformada por parteras, brigadistas de salud, sindicato de Fetsalud y auditores del poder ciudadano, para mejorar la calidad de la atención, la información a los pacientes y elevar el calor humano.
“El sistema de salud no solo es infraestructura, medicamentos, e inversiones en ambulancias y tecnologías, tiene mucho que ver con los aspectos éticos de calidad”, dijo la titular de Salud cuando visitó Granada.
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