Roy Moncada
Para que una quemadura no atente con la vida de una persona ni deje secuelas severas, es importante la atención inmediata y responsable a la persona lesionada por fuego.
Poco se sabe sobre los conocimientos requeridos. Ante este escenario la Asociación Pro Niños Quemados de Nicaragua (Aproquen) imparte el Curso de Atención Básica a médicos generales, enfermeras y miembros de Cruz Roja Nicaragüense. Ayer fue el turno para más de 60 bomberos, institución que normalmente brinda primeros auxilios a las personas quemadas.
El programa, que surgió a partir de 2010, ha capacitado a 500 personas en el país en cómo diagnosticar a personas quemadas y las formas de reanimarlas, aseguró Mario Pérez, cirujano plástico reconstructivo y director médico de la unidad de quemados Aproquen.
Pérez resaltó la importancia de conocer y aplicar las herramientas del curso debido a que poco pueden resolver los cirujanos de las unidades especiales, luego que transcurrieron más de 24 horas de la quemadura y la atención previa no fue de calidad.
Con la capacitación a los bomberos también se enseñaron los factores que se asocian para categorizar una quemadura grave, su extensión en el cuerpo y profundidad.
El mayor Miguel Pantoja, jefe de operaciones de la Asociación Civil de Bomberos Voluntarios, resaltó la importancia del curso, más en estas fechas que es frecuente que las personas, sobre todo niñez se quemen por manipular pólvora.
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