ROMA/AP
El primer ministro interino de Italia Mario Monti afirmó el domingo que no se postulará en las elecciones de febrero, pero que si los partidos políticos que respaldan su programa económico para superar la crisis le piden que encabece el próximo gobierno, podría estudiar la oferta.
Monti descartó dirigir alguna candidatura, al decir “no tengo simpatía por partidos personales”.
En una conferencia de prensa, Monti aclaró también que rechazaría una oferta de su predecesor Silvio Berlusconi para postularse con el boleto de centro-derecha con el respaldo del magnate, dadas las duras críticas de Berlusconi hacia su política económica.
La decisión de Monti pone fin a semanas de conjeturas que dominaron la política italiana y provocaron preocupación en Europa, que desea que continúen las medidas de reforma financiera que Monti aplicó.
El primer ministro, un economista que ha pasado 13 meses dedicado a tratar de enderezar la afligida economía de Italia, dijo que la postura cambiante de Berlusconi, que ha pasado de condenar las políticas económicas del gobierno a elogiar al primer ministro, le convencieron de que “no podía aceptar su oferta”.
Monti fue nombrado por el presidente de Italia para dirigir el país después que Berlusconi fue obligado a renunciar, a raíz de que había perdido la confianza de los mercados internacionales.
Monti renunció el viernes después que el partido de Berlusconi le retiró su respaldo a su gobierno tecnócrata, pero se le pidió que continuara en calidad de encargado hasta que se realicen las elecciones del 24 y 25 de febrero.
Otros partidos centristas en el Parlamento le han instado a que se postule por otro período como primer ministro. Monti respondió: “No me alinearé con nadie”; sin embargo, puso en claro que estaba dispuesto a encabezar el próximo gobierno.
Monti expresó gratitud hacia Berlusconi por haberle prestado su respaldo en las medidas para resolver la crisis y su programa económico.