Gerald Hernández
Cuarenta robos de Everth Cabrera, 30 juegos salvados de Wilton López y siete victorias de Erasmo Ramírez como abridor, son las proyecciones de los nicas para la temporada 2013 de las Grandes Ligas, de acuerdo con la fórmula matemática creada por Bill James.
Por supuesto que nadie puede predecir con exactitud el rendimiento de un pelotero, porque aparte de las cifras no se pueden medir una serie de factores como la salud y la mentalidad del individuo. Sin embargo, de acuerdo con tendencias y considerando que cada jugador permanecerá saludable, varios estadistas han desarrollado sus propias fórmulas, las cuales han tenido algún grado de acierto y sobre todo son de mucho entretenimiento.
Entonces según James, con 40 robos de bases, Cabrera estaría peleando el liderato con Dee Gordon, quien tiene proyectado 44 estafas con los Dodgers, además de Emilio Bonifacio, a quien se le augura 45 asaltos con los Marlins.
Estaríamos pendiente del rumbo que tome Michael Bourn, que es agente libre y de seguir en la Liga Nacional sería uno de los favoritos para ganar el liderato de estafas con 45. Para suerte del nandaimeño, los veloces José Reyes y Shane Victorino partieron a la joven liga.
Según James, Cabrera bateará para .256, lo que parece aceptable, aunque el nica tiene metido entre ceja y ceja acercarse a .300. Al nandaimeño también se le atribuyen 56 carreras anotadas, las que podrían ser pocas para alguien que sería un primer bate a tiempo completo.
En el caso de los lanzadores, a Wilton se le proyectan 30 juegos salvados, pero esta consideración probablemente fue hecha antes que el leonés pasara de Houston a Colorado, en donde no será rematador, sino el preparador de Rafael Betancourt.
Según James, la efectividad de Wilton será de 3.53, lo que haría perder su racha de tres temporadas por debajo del 3.00. El relevista leonés no tendrá un año fácil al tirar en el parque de diversiones de los bateadores.
Finalmente está Vicente Padilla. Si el chinandegano no se mueve al beisbol japonés, de acuerdo con James le espera una temporada de dos victorias con tres derrotas y efectividad de 4.30 en 44 entradas, trabajando exclusivamente como relevista.
Además del factor económico, Padilla está tentado de ir al beisbol japonés porque quiere abrir juegos.
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