Entre las actividades de este 10 de enero de 2013, conmemorativas del trigésimo quinto (35) aniversario del asesinato del doctor Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, destacó la presentación del libro gráfico de Cristiana Chamorro Barrios La democracia de Pedro Joaquín y presidenta Violeta Chamorro .
Este libro, dice en su presentación la hija del doctor Chamorro Cardenal y doña Violeta (como la llama en forma afectuosa el pueblo nicaragüense), es “para honrar su ejemplo de servicio y amor a la patria para compartir su herencia política con las nuevas generaciones y así, de una forma gráfica y sencilla, transmitirles el legado humano, histórico y político de su lucha por la democracia, la paz y el desarrollo económico y social de Nicaragua”.
La misión de los libros es conservar la memoria colectiva de los pueblos, dijo Natalia Solzhenitsina, viuda del eminente escritor ruso ya fallecido, Alexander Solzhenitsin, en la reciente conmemoración del cincuentenario de la publicación del libro Un día en la vida de Iván Denísovich ; en el cual, lo mismo que en su obra cumbre Archipiélago Gulag , el eminente escritor ruso describió las infrahumanas condiciones de “vida” en los campos de concentración estalinistas, en los que fuera recluido durante ocho años como prisionero político porque puso en duda la supuesta capacidad militar del dictador comunista genocida José Stalin.
Es cierto lo dicho por la señora Solzhenitsina. De manera que el libro La democracia de Pedro Joaquín y presidenta Violeta Chamorro ha de servir para conservar o más bien reafirmar en la memoria colectiva a estos dos grandes personajes nicaragüenses. Pero también, según dice su autora, es “un recordatorio que la democracia y los derechos fundamentales no son conceptos abstractos, sino realidades que necesitan de un constante esfuerzo humano y de un activo compromiso de hombres y mujeres para su consolidación, donde se tienen, o instituirlos donde no hemos tenido la dicha de poseerlos”.
Doña Violeta fue la primera mujer presidenta de Nicaragua en toda su historia. También fue la primera y única gobernante democrática que tuvo el país durante el siglo XX y lideró además, con serenidad pero con intrepidez, el escabroso proceso de la triple transición democrática: de la guerra a la paz, del totalitarismo a la democracia y de la economía estatista a la de libre mercado.
El gobierno de doña Violeta fue la materialización de los ideales y el triunfo político del doctor Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, como lo hace notar Cristiana Chamorro Barrios en su libro. Doña Violeta le cumplió a Pedro y le cumplió a Nicaragua, como lo dijera ella misma al entregar el poder en enero de 1997. Lamentablemente el Gobierno siguiente cayó en el lodazal de la corrupción, pactó con la maligna fuerza antidemocrática que había sido vencida pero no extirpada, y facilitó el retorno del autoritarismo gubernamental y la dictadura.
Pero el mismo ejemplo de Pedro y Violeta plasmado en sus imágenes y frases contenidas en el libro La democracia de Pedro Joaquín y presidenta Violeta Chamorro , como dice Cristiana, es una “constancia histórica de que los nicaragüenses somos dignos de tener democracia y vivir en libertad”. Y nadie debería poner en duda que volveremos a tener democracia y a vivir en libertad.
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