Luis Eduardo Martínez
La disputa por una finca, que es apta para la ganadería, dejó a cinco personas heridas de bala este domingo.
El comisionado mayor Carlos Martínez Leytón, segundo jefe departamental de la Policía, confirmó que “para que las cosas no pasen a más nos quedaremos en el punto disputado mientras esto logra resolverse con las autoridades que corresponden”.
Por su parte, Porfirio Soza, representante legal de Lilliam del Carmen González Vallejos y Benito Vallejos Centeno, aseguró que “para evitar que haya más violencia” aceptaban que la propiedad quedara en manos de la Policía y “nosotros vamos a continuar con los juicios”.
El caso es ventilado en el Juzgado Segundo de Distrito Civil de Matagalpa.
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Esta propiedad, de 28 manzanas de extensión se sitúa en la comunidad Las Tunas, kilómetro 96 de la carretera Panamericana Norte, entre los municipios de Darío y Sébaco, departamento de Matagalpa.
La finca fue tomada el 4 de enero recién pasado por más de 300 personas que dicen respaldar a Lilliam del Carmen González Vallejos y Benito Vallejos Centeno, quienes presuntamente ofrecieron lotificar las tierras por contar con documentos emitidos por la directiva y Consejo de Ancianos de la Comunidad Indígena de Sébaco (CIS).
Sin embargo, la propiedad es reclamada también por Rigoberto Vallejos, quien dice contar con un contrato de arriendo con la CIS, el cual expira en 2020 y en virtud del cual interpuso un recurso de amparo por la vía de hecho ante las autoridades policiales.
Ante la pasividad policial, amigos y vecinos de Rigoberto Vallejos pretendieron desalojar por su cuenta a quienes consideran tomatierras, originándose el enfrentamiento a balazos, morterazos y pedradas.
“Parecía que estábamos en guerra”, resumió una mujer omitiendo su identidad.
Entre los heridos, las autoridades solo habían identificado a Berman Duarte González, Donald de Jesús Balmaceda, Javier Huerta Rayo y Andrés Mendoza Vega.
Los dos primeros presuntamente integraban el numeroso grupo que estaba en la finca y los otros dos supuestamente son del grupo que respaldaba a Rigoberto Vallejos y los cuatro fueron llevados al hospital César Amador Molina de Matagalpa.
“Aquí estábamos pacíficamente y nos atacaron por varios flancos”, relató Porfirio Soza, exsecretario político municipal del Frente Sandinista en Matagalpa y representante legal de González Vallejos y Vallejos Centeno.
Soza negó que en el litigio por la finca haya intereses políticos y aseguró que sus representados cuentan con derechos de uso y goce “a perpetuidad” otorgados tanto por el Consejo de Ancianos como por la directiva de la CIS, calificando como “falsos” los documentos que presenta Rigoberto Vallejos.
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