Martha Vásquez
Llorando y pidiendo perdón a la madre de Belkis Muñoz Hernández, el procesado Rodolfo Cubillo admitió ayer ante la juez María Fabiola Betancourt haber disparado contra Belkis, la madrugada del 18 de octubre del 2012.
“Pido que me perdone, lo que pasó fue una equivocación, usted lo verá”, dijo Cubillo a María Isabel Hernández, madre de la víctima.
El hecho sangriento ocurrió en una cuartería ubicada en el barrio Ariel Darce, donde alquilaba la joven, a eso de las 4:30 de la madrugada cuando esta se disponía a tomar el recorrido que la llevaría a su trabajo.
Kennet Muñoz, expareja de la víctima, la amenazaba de muerte y la perseguía donde ella iba, contratando el servicio de un taxi para presionarla y decirle que si la veía con otro hombre la mataría.
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Luego los procesados Kennet Javier Muñoz Palma, expareja de la ahora occisa, quien pagó seis mil córdobas a los otros dos acusados para que la asesinaran, según acusación, también admitió el crimen y los hechos señalados.
Luego el tercer implicado Óscar Martínez Lezama también aceptó haber participado en la muerte de la joven de 25 años, madre de un niño de 4 años.
CONTROL DE LEGALIDAD
Después de estas confesiones, la fiscal Eyra Jirón, especialista en violencia, solicitó a la juez que en vez de iniciar la audiencia preparatoria a juicio se realizará la audiencia para el control de legalidad de un acuerdo al que habían llegado las partes.
“Siendo que los procesados renuncian al juicio y admiten los hechos, solicitó que verifique el control de legalidad del acuerdo, donde la madre de la víctima manifestó estar de acuerdo”, dijo la fiscal.
La judicial Betancourt preguntó a la madre de la víctima sobre el acuerdo y esta respondió llorando que aceptaba la confesión.
“Sí, yo pedí dirección al Señor para que me indicara el camino, qué hacer con esta situación y sí estoy de acuerdo”, dijo Hernández, quien siempre sostuvo entre sus manos temblorosas la foto de su hija y el niño que dejó en la orfandad.
PENAS MÁXIMAS
Acto seguido, la juez empezó a leer el acuerdo donde claramente la Fiscalía solicita 20 años de prisión por femicidio, delito contemplado en la Ley 779, o Ley Integral Contra la Violencia hacia las Mujeres y un año de prisión por uso ilegal de arma de fuego, la que utilizaron para disparar contra Belkis.
Ambas penas son máximas por cada delito, pero será la juez quien decida. Los abogados piden mínimas tomando en cuenta la confesión de los procesados.
Una vez leída la sentencia, programada para el 6 de febrero, estos sujetos serían los primeros condenados por femicidio en Managua, a un año de aprobada la Ley 779.
Una vez más la audiencia empezó tres horas después de lo programado, ya que estaban citados a las 9:00 de la mañana, pero el Sistema Penitenciario sigue llegando tarde con los reos.
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