BURIN/AFP
El ejército israelí evacuó por la fuerza un campamento de manifestantes palestinos, que aplicaban una nueva táctica de protesta no violenta, cerca del pueblo palestino de Burin, al sur de Naplusa, en Cisjordania ocupada, constató la AFP.
Horas antes, cientos de palestinos habían armado este campamento, en el que había cuatro chozas y tres tiendas de campaña, al que bautizaron “Al Manatir” (puesto de guardia).
Los soldados israelíes lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, varios de los cuales fueron arrestados. También se expulsó del lugar a los periodistas.
Un portavoz del ejército afirmó que “una manifestación ilegal y violenta tenía lugar cerca de Burin”. “Unos 150 palestinos se congregaron y lanzaron piedras contra soldados que replicaron haciendo uso de medios de dispersión antidisturbios”, añadió.
“Burin ha perdido gran parte de sus tierras en beneficio de las colonias de la zona, Har Bracha y otras, y está sujeto al terrorismo de los colonos”, declaró a la AFP la militante palestina Abir Kopty.
El mes pasado, militantes palestinos instalaron dos campamentos en Cisjordania para protestar contra proyectos de colonización israelí y la confiscación de tierras, los cuales fueron evacuados por las fuerzas de seguridad de Israel.
El campamento, bautizado “Bab al Shams” (“La puerta del sol”), situado entre Jerusalén Este ocupada y la colonia israelí de Maale Adoumin, procuraba ser una réplica palestina de las colonias ilegales israelíes.
El otro campamento, bautizado “Bab al Karama” (“Puerta de la Dignidad”) se instaló para denunciar la confiscación por el ejército israelí de 50 hectáreas en Beit Iksa, en el noroeste de Jerusalén.
La comunidad internacional considera como ilegales todas las colonias israelíes y no reconoce la anexión de 1967 de Jerusalén Este, en donde los palestinos quieren establecer la capital de su futuro Estado.
