En cinco semanas todos los combustibles han tenido un fuerte incremento en Nicaragua, principalmente las gasolinas.
Con el alza que se aplica a partir de hoy la gasolina súper se ha encarecido 14.11 córdobas por galón —un 11.8 por ciento—, desde el 20 de enero. Es decir, 3.73 córdobas por litro.
La gasolina regular, por su parte, ha aumentado 12.86 córdobas por galón —11.5 por ciento—, equivalentes a 3.40 córdobas por cada litro.
35.23 córdobas pagará desde hoy por el litro de gasolina súper, o 133.3 córdobas por galón.
30.13 córdobas valdrá el diesel (114 córdobas el galón), tras bajar hoy dos centavos.
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El 20 de enero fue la última vez que las gasolinas bajaron de precio. Ese día en Managua la de tipo regular se vendía a un promedio de 29.34 córdobas y la súper a 31.50 córdobas. Después de eso, el domingo 27 de enero, el 3, 10, 17 y hoy 24 de febrero han sostenido la tendencia al alza, según reflejan los monitoreos semanales del Instituto Nicaragüense de Energía (INE).
Los incrementos se han repetido en toda Centroamérica, sin embargo, Nicaragua sigue siendo el segundo país con los precios más altos, superado solo por Costa Rica, según datos de los ministerios e institutos de comercio y de energía del istmo.
El barril de crudo WTI —de referencia para Nicaragua— cerró el viernes en 93.13 dólares, pero en el transcurso de la semana llegó hasta los 96.66 dólares.
Precios no deben variar
El director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Nicaragua (Caconic), Eduardo Fonseca, considera que si bien el incremento que entra en vigencia hoy en las gasolinas es considerable no tiene que desencadenar una espiral alcista en los precios al consumidor.
“Porque el comerciante debe tener en sus estantes productos con el precio que tenían antes”, y no con los nuevos precios.
En el caso que algunos comerciantes aprovechen estos incrementos para aplicar alzas especulativas, añadió Fonseca, sería regulado por la oferta y demanda, pero para ello los compradores deben ser rigurosos en comparar precios y evitar que se les cobre de más.
“El INE debería presentar una perspectiva de si en el futuro va a seguir subiendo o va a bajar, porque el comerciante si ve que es una cuestión estacionaria o momentánea, no va a mover sus precios… Es información importante para los comerciantes”, añadió.
¿Por qué tan caros?
En entrevista con LA PRENSA, Daniel Mencía, gerente general de Puma Energy, afirmó que “acá el precio del combustible va de acuerdo al mercado, no hay un sobreprecio… lo que sucede es que es un mercado pequeño, ineficiente, entonces no se pueden importar las cantidades de petróleo que se puede hacer a otros lados”.
Otros factores son la intermediación de Albanisa y el deslizamiento de la moneda, pues los precios del crudo y derivados están dolarizados.
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