Elízabeth Romero
Casa Alianza atendió el año pasado a 30 víctimas de trata de personas en 25 casos ocurridos en el país, lo que evidencia la ocurrencia de este delito, informó Merardo Solís, funcionario de esa organización.
Según el funcionario, se está registrando este tipo de delito sobre todo con fines de explotación sexual y laboral.
Casa Alianza promovió ayer un foro en el que participaron especialistas de atención a este tipo de víctimas, para abordar lo relacionado con la atención integral a la víctima de trata de personas y violencia sexual.
Esto con el interés de que “la atención integral no se vea hasta garantizar un proceso judicial, la atención integral va más allá del juicio, va hasta lograr la sanación o la disminución de los efectos en las víctimas sobrevivientes del delito que sufrieron”.Esto involucra a la familia, comunidad y sociedad en general.
La mayoría de las víctimas de trata también han sido víctimas anteriormente de abuso sexual. Es por eso que Solís cree que las víctimas de abuso sexual son más vulnerables a caer en las redes de tratantes.
El funcionario considera que la trata de personas a lo interno “se ha invisibilizado”, pero el movimiento de tratantes en el país si se está registrando.
Sobre todo, esto se aprecia en las terminales de autobuses interurbanos, donde se puede observar cómo incluso niñas llegan a Managua viajando solas, indicó Solís, quien aclaró que el tratante no solo es el que te lleva a la fuerza, sino aquellos que bajo engaños hacen ofertas a las víctimas.
Muchas de las víctimas, mujeres sobre todo, caen engañadas por los tratantes, muchas veces por el factor económico con fines de explotación sexual en centros de prostíbulos que es el más visual del fenómeno, pero también hay una trata oculta que por la tolerancia social no se denuncia, que es la explotación para servidumbre.
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