Washington/EFE
El Departamento de Estado de EE.UU. emitió hoy una nueva alerta de viajes sobre Siria y recomendó “enérgicamente” la salida inmediata de estadounidenses que allí permanezcan, ante un mayor riesgo de secuestros y otros problemas de seguridad.
La alerta de viajes, que sustituye a la emitida el 28 de agosto de 2012, recuerda que la situación de seguridad en Siria “permanece volátil e impredecible”, por lo que recomienda “enérgicamente” a los ciudadanos estadounidenses que salgan de ese país “de inmediato”.
La nota señaló que el país continúa afrontando un conflicto armado entre fuerzas del Gobierno y grupos alzados en su contra, con un aumento de riesgo de “secuestros, atentados con bomba, asesinato y terrorismo”.
“Ningún sector de Siria debe considerarse inmune a la violencia, y existe el potencial de actos hostiles en todo el país, incluyendo secuestros. Los fuegos de artillería indiscriminados y bombardeos aéreos, incluso en áreas urbanas con densa población en el país, han incrementado significativamente el riesgo de muerte o de graves lesiones”, indicó el Departamento de Estado.
“La destrucción de la infraestructura, vivienda, instalaciones médicas, escuelas, plantas eléctricas y de agua potable, también ha exacerbado las dificultades dentro del país”, continuó la nota.
Además, existe “la amenaza del terrorismo”, incluso de grupos como el Frente al Nusrah, vinculado con Al Qaeda en Irak. Desde noviembre de 2011, ese frente se ha atribuido cerca de 600 ataques en principales centros urbanos, desde más de 40 ataques suicidas hasta operaciones con pequeñas armas y bombas caseras.
Entre las ciudades afectadas por actividades terroristas figuran las de Damasco, Alepo, Hamah, Dara, Homs, Idlib y Dayr al Zawr. Según el Departamento de Estado, sitios públicos como edificios gubernamentales, centros comerciales y otros espacios han sido blanco de ataques.