Barcelona/Ap
El sexto “clásico” de la temporada en el futbol español acabó ayer en una nueva victoria del Real Madrid, 2-1, sobre el Barcelona por la 26 fecha de la liga.
El segundo triunfo en cuatro días del equipo blanco sobre el líder del campeonato, al que también venció el martes en Barcelona por 3-1 para eliminarlo en semifinales de la Copa del Rey, significó el primero de local en un “clásico” liguero para el Madrid desde 2008.
También recortó a 13 puntos la ventaja del Barsa respecto al Madrid en la clasificación, con 12 fechas hasta la conclusión.
Pero, más que la liga, la victoria “merengue” pareció confirmar un cambio de jerarquía entre ambos clubes, pues el Barsa solo ha ganado uno de sus últimos ocho enfrentamientos, por tres del equipo de José Mourinho.
“Estoy contento pese al resultado por la reacción de los jugadores. Hemos dado la cara y luchado hasta el final. No creo que sea un problema físico”, analizó Jordi Roura, sustituto del timonel azulgrana Tito Vilanova, en tratamiento de cáncer.
Ambos conjuntos tienen compromisos más acuciantes en la Liga de Campeones, donde el cuadro madridista espera sellar su boleto a los cuartos de final el martes en cancha del Manchester United tras empatar 1-1 en la ida en el Santiago Bernabéu.
El Barsa, a su vez, recibe el 12 de marzo al Milan, con la misión de remontar el 2-0 adverso del partido de ida.
Karim Benzema puso en ventaja al Madrid a los seis minutos, pero el argentino Lionel Messi niveló a los 18 para alargar a 16 su récord de fechas consecutivas con gol, sumar 39 dianas en liga e igualar a su compatriota Alfredo Di Stefano como máximo goleador histórico de los clásicos, con 18 tantos.
Pero, tras el ingreso de suplente de Cristiano Ronaldo en la segunda mitad, el Madrid reaccionó con el tanto decisivo de Sergio Ramos a los 82.
El técnico José Mourinho, del Real Madrid, dejó en la banca a Cristiano Ronaldo, Mesut Oezil y Xabi Alonso, dando entrada al canterano Alvaro Morata, quien no tardó en validar su condición de titular con la asistencia del primer gol a Karim Benzema. El tanto, forjado en apenas cuatro toques, retrató los males del Barsa que, en su segunda derrota del torneo, alargó a 13 la racha de partidos consecutivos encajando al menos un gol.
Ver en la versión impresa las páginas: 11 A