Arnulfo Agüero
Con una noche de arte abstracto y música, el pintor y músico Víctor M. Leiva celebró el relanzamiento del grupo La Mancha de Leiva, cantando Ritmo bravo , en el Salón de los Cristales del Teatro Nacional Rubén Darío.
Leiva tiene más de 13 exposiciones personales y 30 colectivas en países de Centroamérica, Estados Unidos y Europa, lo que muestra su madurez y evolución pictórica que lo ha llevado a la abstracción expresionista.
Agregó que sus composiciones cromáticas tienden a los tonos incandescentes, degradaciones e impresiones, formas geométricas, círculos y otras formas no definidas trabajadas en formatos variados que se alejan del tradicional marco.
Sobre las técnicas explicó que trabaja con el óleo, acrílico y la pintura industrial. Estas obras fueron realizadas en el caballete, otras en el piso, según la circunstancia de ejecución.
En anteriores ocasiones ha titulado las exposiciones metáfora, pero esta prefirió llamarla sencillamente “pinturas recientes o bien pinturas en acción, por sus expresiones violentas, formatos diversos, matices de colores fuertes, composiciones libres y emociones que lo han llevado al desahogo”, revela.
El grupo La Mancha de Leiva se fundó en 2006, fue criticado por sus variaciones musicales, que se alejaban del son nica que cultivó su padre, al fusionar el rock con el son nica y los ritmos del Caribe con el rock. Hoy en día otros grupos se han sumado en la mezcla de estilos, dice.
El nuevo disco que próximamente estará de venta al público contiene temas mezclados de rock, tecno, salsa y boleros con baladas. “Es una sola ensalada lo que trae este disco”, explica. El disco Matando el chivo contiene 12 temas, como Cuando te conocí , Miriam , Me dijiste que me amabas, Ayer recibí tu carta , entre otras.
[/doap_box]
HASTA LA POSTERIDAD
Bayardo Quinto Núñez
La desdicha no es la ausencia, el mayor defecto de la memoria es el olvido, que es el paraíso de la memoria. Pero hay que rememorar que la idea y realidad, que uno va desaparecer no alarma, nuestras obras quedan hasta la posteridad y en la memoria de la humanidad.
TE VIOLO LAS PALABRAS
Bayardo Quinto Núñez
Te violo las palabras, mente, robo tus ideas, que no causa dolor. Pero temo al dolor y la muerte no, esta siempre llegará, de tal suerte. ¿Trampas tienen las palabras? pues, no, simplemente leíste a tu conveniencia, que es otro asunto y es mala FE…, para tu desarrollo letrístico de futuro…
DIÁLOGO INOCENTE
Bayardo Quinto Núñez
Vaya usted con esas quejas a los ricos, que a ellos se les debe pedir limosna y no a los pobres como yo, expresó Luis a Roberto. Ambos se postulaban, pero Roberto notó los argumentos de Luis, y se lo hizo notar verbalmente, pero no hizo caso para eliminar diáfana e imaginable causa histórica y género fundamental como una pieza forense para exhibir cortante avatares de desordenadas notas, como abismos de causas transitorias. Entonces Luis le contestó: hazlo una realidad en tu vida. ¿Estás comprometido? Pues, sos una lámina imantada, con inocentes preceptos y conceptos que dicha realidad no ha podido descifrar. Claro, la realidad tiene un diálogo inocente, inquirió Roberto. Bueno es un tiempo del espejo corroído por el tiempo, pero si objetivo, como tiempo sin historia, pero si todo tiene su historia verídica innegable. Ella, siempre se postula y deja sus espectros, finalizó Luis.
CAVILOSIDADES
Bayardo Quinto Núñez
José tenía un rostro robicundo, recibió con una sonrisa a su novia. Miró el reloj, eran las diez de la mañana de ese tiempo, por unos momentos se puso a temblar pero abrió la puerta, era su novia que le buscaba. La hizo entrar y le brindó asiento y una taza de té de flores de manzanilla, que ambos degustaron en la biblioteca. Preguntó él con cierta sequedad, qué se la trae a estas horas mi princesa. Bueno, he venido para decirte que nuestro noviazgo no puede proseguir, expresó la novia. ¡Ya! me dirá que se limita a cumplir órdenes. ¿O por qué lo hace?, inquirió José. Rebosando de alegría le contestó la novia: “No sos consecuente con lo que hablas, no hay correspondencia entre tu palabra y acción, sos una cinta desatada”. José, cavilaba profundamente para encontrar la señal y se dijo: “Este es un estado larval en los crujidos del tiempo, pero la historia tiene la verdad y todas sus expresiones”. Okey, está bien Justina. Se despidieron. Con el tiempo el oprobio de la infamia les dijo la verdad, pero era muy tarde. Pero esa es la verdad, que ya está escrita.
Ver en la versión impresa las páginas: 6 B
