Edgard Rodríguez c.
Venezuela aterrizó en el Clásico Mundial del Beisbol con la ofensiva más temible que un equipo podría reunir, pero ha salido por la puerta trasera, al no ganar ni un partido.
Puerto Rico se encargó de visar el pasaporte de vuelta a casa para los venezolanos, al derrotarlos ayer 6-3, a pesar que habían tomado ventaja temprano en el partido.
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Nelson Figueroa (1-0) quien cedió cinco de los siete hits que conectó la tropa de Miguel Cabrera, Carlos González y Pablo Sandoval, se llevó la victoria.
Venezuela se puso adelante 2-0 en el tercero, en un operativo liderado por dobletes de Omar Infante y Sandoval, pero los boricuas nivelaron en el cuarto.
Y se fueron adelante 3-2 en el quinto, cuando Ángel Pagán conectó el hit decisivo, estando ya en las regaderas Carlos Zambrano, el abridor de los suramericanos.
Tras la salida de Zambrano, Enrique González pasó fugazmente por la loma, pero fue Henderson Álvarez el más castigado con cinco cohetazos y tres carreras, para cargar con la derrota.
Puerto Rico en cambio, contó con relevo magistral de Giovanni Soto, quien no permitió hits ni carreras en tres entradas y tras titubeos de JC Romero, Fernando Cabrera dio el tiro de gracia.
De esta forma, los clasificados por el grupo C son Puerto Rico y Dominicana, quien se mueven hacia Miami, Florida, a la siguiente ronda del Clásico Mundial.
México por su lado, está en problemas, tras ser derrotado 10-3 por Canadá, en un partido que terminó en trifulca y con varias expulsiones de ambos bandos.
Los big leaguers Justin Morneau y Michael Saunders lideraron el ataque canadiense con cuatro hits y tres remolques cada uno, sacudiendo a Marco Estrada.
Una noche antes, México (1-2) había lucido en gran forma, al imponerse a Estados Unidos, otro equipo que no ha lucido bien.
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