La Paz/EFE
La ONU recomendó hoy a Bolivia permanecer en el sistema interamericano de protección de los derechos humanos al considerar que se trata de un “instrumento valioso” que se complementa en esa tarea de defensa con los esfuerzos que realizan ese organismo mundial y también el Gobierno de Evo Morales.
En declaraciones a Efe, el representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Bolivia, Denis Racicot, resaltó la importancia del actual proceso de evaluación y reforma del sistema que llevan adelante sus integrantes, con “posiciones de carácter soberano” que la ONU respeta.
“Es una evaluación y, en ese contexto, nos parece positivo todo ese proceso, pero por otra parte, pensamos y deseamos como tal que Bolivia pueda permanecer en el sistema interamericano de protección de la OEA”, dijo Racicot.
El funcionario respondió así al anuncio que hizo el lunes el presidente Morales de que su Gobierno estudia retirar a Bolivia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Según Racicot, “estamos lejos” de que Bolivia abandone el sistema regional porque el Gobierno de Morales está realizando “esfuerzos de evaluación, de reflexión y de propuesta” sobre el sistema “antes de llegar a una decisión de esa naturaleza”.
Destacó que el sistema interamericano “es un instrumento valioso de protección y promoción de los derechos humanos” que complementa las acciones que desarrolla cada gobierno en ese sentido así como el trabajo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
También resaltó el papel “muy importante” que cumplió el órgano ante los “fenómenos masivos de violación de los derechos humanos” ocurridos en Latinoamérica durante las dictaduras militares de los años 70 y 80.
“La particularidad del sistema interamericano es que tiene dos niveles: la comisión y la corte. Y la corte tiene la capacidad de pronunciar sentencias que son de carácter obligatorio en su ejecución para los Estados partes y eso tiene un valor muy importante”, señaló el funcionario.
Por ello, opinó que si Bolivia u otros países se retirasen del sistema interamericano “habría un vacío al no existir la posibilidad de tener esa protección desde el ámbito regional”.
Precisamente la CIDH trató esta semana una denuncia contra el Gobierno de Bolivia a propósito de la construcción de una carretera que atravesaría la reserva natural del Tipnis, obra a la que se opone una parte de los indígenas que allí viven.
Opositores y activistas bolivianos han expresado su preocupación y rechazo al anuncio de Morales, para quien la CIDH es “como otra base militar” que está financiada por Estados Unidos para “tratar de juzgar a los países”.
El Defensor del Pueblo boliviano, Rolando Villena, defendió hoy la necesidad de aplicar cambios a la CIDH que la hagan “más efectiva, incluyente, independiente y menos burocrática”, si bien dijo que una eventual decisión de retirar al país de ese organismo puede generar distorsiones en su relación con todo el sistema.
