Carla Torres Solórzano
La mezcla de tierra y sudor en el rostro de Karuen Ruiz Martínez no puede ocultar la valentía y el coraje de esta joven madre que participa en el octavo curso de rescate en estructuras colapsadas que imparte la Dirección General de Bomberos en conjunto con Cruz Roja Nicaragüense.
Ruiz Martínez, brigadista de primeros auxilios del barrio Acahualinca, es parte del grupo de ocho mujeres que participan en la capacitación, quienes a pesar del fuerte cansancio y los desmayos no han abandonado el curso.
El comandante Javier Amaya, director de la Escuela Nacional de Bomberos, manifestó que la intención del curso es dotar a los jóvenes —de diferentes instituciones como Cruz Roja Nicaragüense, Defensa Civil, Bomberos y pobladores de los barrios capitalinos— de las herramientas necesarias para poder salvar vidas en casos de terremoto.
Además explicó que la capacitación es intensiva. Los participantes deben internarse durante una semana en la Escuela Nacional de Bomberos para recibir entrenamiento durante todo el día e incluso hasta altas horas de la noche.
“Tenemos 23 jóvenes, a quienes se les enseñan las técnicas de levantamiento de estructuras, identificación de los elementos constructivos de una edificación, remover escombros y rescate de víctimas, entre otros”, dijo Amaya.
Franco Parrales, técnico responsable de Cruz Roja Nicaragüense, manifestó que desde que inició el proyecto Reducción de Riesgo ante Terremotos se ha capacitado aproximadamente a 180 personas para que puedan dar respuesta ante una emergencia.
Ver en la versión impresa las páginas: 4 A