William Aragón Rodríguez
“Además, les ayudamos a saber identificar los grupos de amistad y los grupos de presión y qué actitud asumir ante ellos, y también a evitar el “bullying” o acoso escolar”, dijo la capitana Sandra Mejía.
La directora de la Escuela Monseñor José del Carmen Suazo, de la ciudad de Somoto, María Elsa Benavidez Cruz, expresó reconocimiento especial a la Policía. “Siempre tenemos agentes que están pendientes de la entrada y salida de los niños para protegerlos. Problemas de drogas no tenemos, no hemos detectado eso dentro de la escuela”, indicó al final.
[/doap_box]
Corresponsal/Madriz
José Modesto Tercero Vásquez, de 10 años, que cursa el sexto grado de primaria en la Escuela Monseñor José del Carmen Suazo de la ciudad de Somoto, en el departamento de Madriz, no sabe de qué le hablan porque no conoce las drogas, pero sí afirma que se va a cuidar porque él quiere ser médico cuando sea grande.
Mientras, Kenny Núñez, de 10 años, quien cursa el sexto grado en la misma escuela, asegura que le gustó la charla que les impartieron los policías sobre cómo rechazar la invitación a consumir drogas, “dicen que no debo consumir eso porque daña mi salud y que después me mata”, comentó.
Tanto José Modesto como Kenny formaron parte de los 35 alumnos del sexto grado B de esta reconocida escuela de primaria, donde casi 900 escolares recibieron las charlas que imparten las autoridades policiales sobre cómo aprender a tomar decisiones y a rechazar el uso de drogas y la violencia.
Por 45 minutos los alumnos estuvieron atentos en la clase de “convivencia y civismo” que impartió la capitana Sandra Mejía, segunda jefa de Seguridad Pública de la Policía en Madriz.
“Estaremos impartiendo estas charlas en otras cuatro escuelas más, algunas situadas en comunidades donde hay grupos juveniles que con frecuencia desatan desórdenes públicos”, explicó.
Por siete semanas esperan desarrollar el método instructivo conocido en inglés como “Dare”, con el que varios oficiales de la Policía a nivel nacional fueron capacitados por la Embajada de Estados Unidos, en Managua. Además les facilitaron folletos que explican paso a paso cómo rechazar las drogas y evitar la violencia.