Caracas/EFE
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, insistió hoy en que no habrá impunidad para quienes incitaron a la violencia los últimos días en el país, después de que el lunes se produjeran 8 muertos y más de 60 heridos tras protestas opositoras, ni tampoco contra quienes cometieron los crímenes.
“Yo les digo a ustedes: no habrá impunidad. Aquí va a haber justicia, aquí van a pagar los crímenes quienes los incitaron y quienes los cometieron”, señaló Maduro durante su acto de investidura.
“Son crímenes producto del odio fascista”, manifestó.
El Gobierno ha responsabilizado al líder opositor, Henrique Capriles, de los actos de violencia que se desataron en el país luego de las elecciones presidenciales del domingo pasado, en las que Maduro se impuso por un estrecho margen de 1.83 puntos.
Capriles dijo ese día que no aceptaría los resultados hasta que se hiciera una revisión del 100 % de los votos y llamó inicialmente a sus seguidores a hacer un cacerolazo el lunes, y a salir el martes a protestar pacíficamente ante las sedes regionales del Poder Popular.
También llamó a una marcha el miércoles que finalmente fue desconvocada después de que Maduro, hasta hoy presidente encargado, la prohibiera.
“Lo triste es el saldo que tuvimos”, se lamentó Maduro al asegurar que hay medios que aseguran que esas personas fallecidas, que el presidente condecoró como “héroes” y “mártires” de la patria, son mentira.
El gobernante aseguró que las autoridades ya tienen detenidos los “perpetradores de estos ataques criminales, los autores materiales”, aunque no precisó su identidad ni donde se encuentran recluidos.
Maduro asumió hoy como presidente para el periodo 2013-2019 durante una ceremonia en el Parlamento a la que no asistió la bancada de la oposición, que considera su gobierno “ilegítimo” hasta que se verifique el 100 % de la votación del pasado domingo.