Kabul/EFE
Al menos tres soldados de las fuerzas de la OTAN fallecieron hoy en el sur de Afganistán por la explosión de un artefacto, informó hoy el organismo internacional en un comunicado.
Los tres soldados de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la OTAN murieron tras la detonación de un “artefacto explosivo improvisado” (IED, en sus siglas en inglés), según la nota.
La ISAF, como es habitual, no reveló la identidad o nacionalidad de los soldados ni la ubicación exacta del incidente.
Según el portal independiente icasualties.org, que no incluye estas últimas víctimas, en lo que va de año han perdido la vida por el conflicto afgano un total de 39 soldados de la OTAN.
Efe contactó con los principales portavoces de los insurgentes en Afganistán, Yusuf Ahmadi y Zabiulá Muyahid, y los dos aseguraron carecer por el momento de detalles sobre el incidente.
Las bombas camineras son usadas con frecuencia por los insurgentes talibanes en sus campañas contra las fuerzas militares afganas y la misión de la OTAN en el país y están consideradas la principal causa de bajas entres las filas de ambos contingentes.
Los sucesos violentos son especialmente frecuentes en el arco suroriental del país, donde predomina la etnia pastún, propia de los talibanes.
Los insurgentes buscan la retirada de las tropas de la OTAN desplegadas en el país y la caída del Gobierno del presidente afgano, Hamid Karzai, y reimplantar así un régimen integrista islámico, como el que fue derrocado en 2001 por EE.UU.
