El líder norcoreano, Kim Jong-Un, envió este miércoles a China a un alto oficial del ejército en el marco de las relaciones distendidas entre Piongyang y su aliado chino, anunció la agencia oficial de noticias KCNA.
Choe Ryong Hae, director del Buró Político del Ejército Popular de Corea, viajó a China como enviado especial de Kim Jong-Un, dijo la agencia sin precisar la razón de su visita.
Choe es probablemente el más alto responsable norcoreano que visita China después de Kim Jong-Il, el difunto padre del actual líder del régimen, en agosto de 2011, menos de seis meses antes de su muerte.
China, el único aliado de peso de Corea del Norte y su principal apoyo, es vista como la mejor situada para influir en el impredecible régimen de Piongyang. Pero Piongyang ha enfurecido a su poderoso vecino al ignorar sus advertencias contra una desestabilización de la región, realizando, en un año, dos disparos de cohetes (uno exitoso, en diciembre), considerados por los occidentales como pruebas encubiertas de misiles balísticos, así como un ensayo nuclear (12 de febrero).
Pekín, a menudo criticado por su estrategia de obstrucción sistemática, en la ONU, para evitar represalias demasiado severas contra Pyongyang, ha votado así las nuevas sanciones contra el régimen norcoreano adoptadas por el Consejo de Seguridad de la ONU tras la prueba nuclear en febrero, que incluye el bloqueo de cuentas bancarias.
