TEHERAN/AP
El presidente iraní Mahmoud Ahmadineyad dijo el miércoles que una decisión de las autoridades electorales de descalificar a su principal asistente de las elecciones presidenciales del mes próximo es un acto de “opresión” y que planteará el caso al líder supremo de la nación.
Sus comentarios aparecen en su cibersitio, president.ir, un día después que el Consejo Guardián retiró de la lista final de candidatos a Esfandiar Rahim Mashaei.
Pese a la promesa de Ahmadineyad de apelar, es improbable que el Consejo tome una decisión sin la bendición del líder supremo, ayatola Ali Jamenei. Admitió solamente a ocho candidatos, en su mayoría respaldados por los clérigos intransigentes.
El fallo asesta un rudo golpe a las esperanzas de Ahmadineyad de que le suceda un partidario. No puede presentarse a las elecciones del 14 de junio debido a los límites impuestos por la constitución iraní.
“Creo que el derecho de un hombre oprimido no será pisoteado a este nivel en un país donde hay Velayat-e-Faqih”, dijo Ahmadineyad refiriéndose al sistema islámico iraní en el que un clérigo de alto rango sirve como líder supremo y autoridad definitiva en todas las cuestiones de estado.
Ahmadineyad manifiesta lealtad a Jamenei, aunque su supuesto desafío en 2011 a la autoridad del líder supremo lo enfrentó a los conservadores que antes lo habían respaldado y señala el comienzo de la declinación de su situación política.
El presidente calificó a Marshaei de “hombre piadoso, recto y competente”. Agregó que apelará “por medio del líder exaltado hasta el último momento con la esperanza de que el problema se resuelva”.
Ahmadineyad ha apoyado firmemente a su protegido. Pero Mahsaei disgusta a los intransigentes debido a su supuesto papel en el enfrentamiento entre Ahmadineyad y los clérigos gobernantes. Lo han denunciado como parte de una “corriente desviacionista” que busca socavar el sistema islámico nacional.
El Consejo también vetó al expresidente Akbar Hashemi Rafsanjani, un centrista que había despertado las esperanzas de los reformistas.
Rafsanjani es uno de los fundadores de la revolución islámica de 1979 que llevó a los clérigos al poder. Era el confidente del ayatola Ruhola Jomeini, líder espiritual de la revolución de 1979. Incluso Jamenei debe en gran parte su posición al apoyo de Rafsanjani.
Su rechazo asesta un golpe desmoralizador a los grupos prorreformistas.
