Carla Torres Solórzano
¡Que se vaya Roberto López! ¡Que se vayan! Coreaban enardecidos decenas de adultos mayores después de esperar en vano durante dos días para ser atendidos por los funcionarios del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS).
Además los extrabajadores exigen la entrega de ayudas técnicas como bastones, sillas de ruedas, anteojos, entre otros. El INSS se había comprometido a entregar estas ayudas, sin embargo no se reciben desde noviembre del año pasado.
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Porfirio García, presidente de la Unidad de Adultos Mayores (UNAM), anunció que esta organización iniciará una campaña para lograr la destitución de Roberto José López Gómez, presidente ejecutivo del INSS y de Sagrario Benavídez, vicepresidenta de dicha institución.
“Ellos no quieren resolver, lo mejor es que se vayan. ¿Cómo es posible que manden a los trabajadores a su casa y no cumplan su jornada laboral y después reciban tranquilamente su salario?”, cuestionó García.
Además expresó que muy pronto se tomarán de forma sorpresiva las instalaciones de cada una de las sucursales del INSS.
“Traigan chaquetas, abrigos y capotes para protegerse del frío, porque la próxima vez estaremos aquí por varios días, hasta que se den cuenta que los adultos mayores estamos hablando en serio”, dijo García a los miembros de la UNAM.
Desde tempranas horas de este viernes los jubilados, bajo los inclementes rayos del sol y luego amenaza de lluvia, protestaron nuevamente frente al edificio vacío, sede de la institución encargada de resguardar la seguridad social de los trabajadores y extrabajadores.
Una de ellas, doña Dora Orozco Canales, originaria de Ciudad Sandino, asegura no soportar más la inclemencia del Gobierno hacia los adultos mayores al no entregar la pensión reducida de vejez.
“Nos sentimos burlados porque aquí no hay nadie. Se nos están escondiendo. Trabajé cinco años en una empresa textilera, donde coticé cinco años al INSS y es justo que me regresen mi plata”, se quejo Orozco.
Cabe señalar que los trabajadores del INSS, una vez más habían sido avisados de la protesta y por órdenes de López Gómez, se les brindó otro día libre para no atender a los demandantes ni al público en general, hasta el próximo lunes.
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