Es sumamente alarmante todo lo relacionado con el proyecto del gran Canal Interoceánico de Nicaragua que ha anunciado el Gobierno, y que considera un hecho, en un corto plazo, a juzgar por la premura con la que ha hecho funcionar su aplanadora en la Asamblea Nacional para aprobar las leyes pertinentes y para anular otras que no convenían.
En primer lugar, de acuerdo con los términos de este contrato, inconsulto y casi secreto, la nación de Nicaragua prácticamente es traspasada a manos de un oscuro ciudadano chino, con una reputación en los negocios casi inexistente, pues solo por este Gobierno es conocido. Este personaje va a tener un poder sin límites para empezar a revender los derechos que se le están otorgando, sin ninguna garantía para Nicaragua, por el fabuloso espacio de cien años. ¿Cómo le podemos llamar a esto?
Y si, como ha querido dar a entender la pareja que está en el poder y los que están de acuerdo en cómo se están elaborando las leyes con que se hará válida la entrega de los derechos del país; y si fuera en verdad la nación china y su gobierno el encargado del proyecto; y si estuviera en sus manos el diseño técnico y medioambiental, también estaríamos en un gran peligro, pues este país es el que peor ha tratado su medioambiente. Ha convertido su río madre, cuna de la civilización china y el más grande de ese país, en un caudal que tiene 1/3 de sus aguas severamente contaminadas. De tal modo que se ha hecho inservible, incluso para uso agrícola e industrial. Las ciudades que están a su vera han ido creciendo y lo usan para vertedero de aguas residuales.
En todo el territorio de ese gran país, el 97 por ciento de todas las aguas subterráneas está contaminado. Hay un lago de agua dulce, el tercero de China, el Poyang en la provincia de Jiangxi, que tiene aproximadamente entre 3,585 m2 a 4,400 en tiempos de lluvia, y se está secando debido a la fabricación de la presa de las Tres Gargantas y el cambio climático.
Este no es el único, también otro de los grandes lagos de agua dulce de China, el Dongting, en la provincia de Hunan, se está secando
Según el ministerio de asuntos medioambientales chino, 40 millones de personas han sido afectadas por todos estos factores combinados.
Aquí en este país, ya tenemos suficiente experiencia en cómo se pueden destruir los recursos naturales, y las bellezas en las que Nicaragua es tan pródiga, para entregar el país entero, para que hagan y deshagan, sin que podamos opinar, de aquí a cien años.
Es deseo ferviente de todos en general ver progreso y desarrollo en nuestro país, pero con garantías de que se va a hacer lo que se debe en todos los aspectos.
Poniendo a Nicaragua en primer lugar, por encima de cualquier otro interés particular, político o geopolítico, económico o de protagonismo ideológico o de cualquier otra índole, velando por los intereses de Nicaragua y de cada uno de los nicaragüenses para que todos y principalmente nuestro país queden protegidos en las leyes que tan apresuradamente quieren aprobar
Es una gran responsabilidad la que tiene este gobierno en sus manos y a todas luces se puede apreciar que dado lo grande y lo importante de este proyecto, lo que se ha hecho hasta ahora se ha hecho con una gran irresponsabilidad.
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