Jeniffer Castillo Bermúdez
Nicaragua sigue siendo un país exportador de materia prima, pero aún no ofrece valores agregados, dice Mario Quintana, experto en educación.
En ese sentido, comenta Quintana, la educación técnica debe reenfocarse hacia las demandas del país y la modernización de exportación de los productos.
En el estudio “Opciones de educación para el trabajo para adolescentes y jóvenes en riesgo de exclusión social”, que será presentado hoy por el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (Ieepp), se destaca que el país necesita ampliar las ofertas de formación técnica.
“La agenda va cambiando, hemos hablado del cambio de la matriz energética, los efectos de la roya y ahora hablamos de la construcción del Canal, pero la oferta técnica no ha cambiado. La oferta sigue siendo tradicional”, dice Quintana.
En Nicaragua hay 43 centros de la red del Instituto Nacional Tecnológico (Inatec), pero hay alrededor de 150 centros de formación técnica. El sesenta por ciento está en manos de la empresa privada.
El país invierte en educación técnica 301.1 millones de córdobas. Actualmente las carreras técnicas existentes están en un periodo de actualización porque “tenemos que fortalecer las carreras que se necesitarán para la construcción del Canal Interoceánico”, afirma Reyna Hernández, del Centro de Capacitación Profesional Nicaragüense-Alemán (Cecna).
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