Josué Bravo
Durante la campaña electoral (2010), en la que se eligió a Laura Chinchilla como presidenta, Oscar Arias, quien finalizaba su segundo mandato, apoyó a la empresa canadiense Industrias Infinito para la extracción de oro en Crucitas; según el excanciller y ahora ministro de Ambiente, René Castro.
Arias y Castro, ambos del oficialista Partido Liberación Nacional (PLN), se mantienen públicamente enfrentados y en un artículo de opinión, el ministro, quien fue jefe de campaña de Chinchilla, denuncia “el rol del presidente Oscar Arias para blindar la concesión minera. Ese rol se convertía en un lastre para el Gobierno y la campaña de doña Laura Chinchilla”.
El cuestionado proyecto minero quedó sepultado dentro del marco judicial costarricense, luego que la Sala Cuarta Constitucional, el mes pasado, rechazó un recurso de inconstitucionalidad contra fallos judiciales que le anularon permisos ambientales para extraer oro cerca de la frontera con Nicaragua.
El fallo fue refrendado por la Sala Primera de la Corte.
Según Castro, “la precampaña y la campaña del 2010 que dirigí, adoptó (inadvertido para la prensa) su propio código de conducta y estableció que ‘no se recibirían donaciones de casinos, ni mineras de oro’… don Oscar montó en furia y no dio por recibido el mensaje”.
“El presidente Arias más bien exigió que la campaña diera seguridades en privado y en público a Industrias Infinito”, añadió.
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