Miles de personas se manifestaron el domingo en Nueva York, al día siguiente de la polémica absolución del vigilante George Zimmerman, que el año pasado mató de un disparo al adolescente negro Trayvon Martin.
La protesta transcurrió de forma pacífica y sin incidentes. Los manifestantes portaban pancartas con la imagen de adolescente y, a pesar del intenso calor, algunos llevaban un suéter con capucha, el mismo atuendo que vestía el joven de 17 años cuando fue abatido. Muchos mostraron su cólera por la absolución, otros su incertidumbre. “Tengo miedo de tener un hijo que se me parezca”, explicó una manifestante negra.
La protesta se inició por la tarde en Union square, en el sur de Manhattan, luego el cortejo subió la Sexta Avenida hacia el norte en medio de fuertes medidas de seguridad. Comenzaron siendo cientos, pero luego fueron miles las personas que se manifestaron contra el fallo del tribunal estatal de Florida que dejó libre a Zimmerman.
“Estoy consternada”, confió Carli VanVoorshis, una peluquera de 21 años. “El chico no estaba armado y el hombre que tenía un arma sale bien parado. Decir que no fue un prejucio racial es mentirnos a nosotros mismos”. Entre la multitud, que gritaba “Sin justicia no hay paz”, había una mayoría de afroamericanos, pero también blancos y latinos. “La gente dice 'culpable'” y “Queremos justicia y la queremos ahora”, eran otras de las consignas que se escuchaban.
“Tenemos un gran problema racial y tenemos otro problema con las armas de fuego”, explicó Rodney Rodríguez. Rhada Blank, venida desde el barrio de Harlem con unas amigas, confesó que, al conocer el veredicto, pensó en irse de EE.UU.: “Hoy no me siento bien siendo estadounidense”. “La gente piensa que hemos avanzado porque Obama se convirtió en presidente. Pero este veredicto demuestra que no hemos superado la cuestión racial. Tenemos un largo camino por delante”, añadió.
“Encarcelen a los racistas, no a los jóvenes negros”, leía una pancarta. Otra afirmaba: “Todos somos Trayvon. Todo el sistema es culpable”. Uno de los manifestantes portaba una camiseta que leía: “Soy negro, por favor no me dispare”. Varias ciudades estadounidenses fueron escenario de protestas el domingo, principalmente Chicago, Filadelfia, Washington, Atlanta y San Francisco.