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El receptor de San Luis, Yadier Molina, entra a la segunda mitad de la temporada como el líder de los bateadores de la Liga Nacional. LA PRENSA/AP

Molina tras el título de bateo

Yadier Molina no es Iván Rodríguez —aunque podría llegar a serlo algún día— pero el receptor de los Cardenales de San Luis intenta lograr una hazaña que haría sentir orgulloso al mismo Rodríguez, un futuro miembro del Salón de la Fama de Cooperstown.

San Luis

Yadier Molina no es Iván Rodríguez —aunque podría llegar a serlo algún día— pero el receptor de los Cardenales de San Luis intenta lograr una hazaña que haría sentir orgulloso al mismo Rodríguez, un futuro miembro del Salón de la Fama de Cooperstown.

“No hay comparación, para mí Iván ha sido uno de los mejores, sino el mejor receptor de Grandes Ligas”, dijo Molina a ESPNdeportes.com durante las festividades del Juego de Estrellas. “Iván ha sido el mejor del mundo. Lo mío es ganar y no compararme con nadie. Solamente juego mi juego”, agregó Molina.

Rodríguez, quien se retiró hace dos años, bateó .296 con 2,844 hits, un premio de Jugador Más Valioso y 13 Guantes de Oro en 21 temporadas. “Pudge” ganó un anillo de Serie Mundial, fue convocado a 14 Juegos de Estrellas y en 2017, muy probablemente, el puertorriqueño será el próximo latinoamericano en Cooperstown.

Molina, de 31 años, se ha convertido en el Rodríguez de estos tiempos en la receptoría. El menor de la trilogía de hermanos receptores boricuas batea .284, ha ganado dos de las tres Series Mundiales en que participó y ha jugado en el partido de estrellas y recibido el Guante de Oro por cinco años seguidos.

Pero Molina podría lograr algo que no hicieron Rodríguez, Bench, Yogi Berra o Mike Piazza, quienes son considerados los mejores de todos los tiempos en la posición número dos.

Molina comienza la segunda mitad de la temporada como líder de bateo de la Liga Nacional con promedio de .341, nueve puntos por encima de su compañero Allen Craig. El puertorriqueño busca convertirse en el quinto receptor en los 138 años de la liga que gana la corona de bateo. Buster Posey, de San Francisco, lo hizo en 2012.

“Es una bendición, la verdad es que he trabajado mucho para estar donde estoy y me siento contento por lo que he hecho”, dijo Molina, quien ha bateado sobre .300 en cada una de las últimas tres temporadas.

“Pero solamente hemos jugado media temporada y aún falta mucho”, dijo. “Hay que terminar fuerte”, agregó.

Molina, quien recibió el Guante de Oro en los últimos cinco años, podría convertirse en el primer cácher de la Liga Nacional con el título de bateo y el premio a la excelencia defensiva en una misma temporada.

Desde que se comenzó a entregar el Guante de Oro, solamente Joe Mauer, de Minnesota, en 2008 y 2009, logró el doblete. Mauer, quien tiene tres coronas de bateo y tres mascotines dorados, es el único receptor de la Liga Americana con al menos una corona de promedio al bate.

Deportes bateo Molina título archivo

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