Elízabeth Romero
La juez suplente de Audiencia de Jinotega, Yesenia Miranda, admitió la acusación por asesinato y tentativa de asesinato presentado por la Fiscalía en contra de Miguel Ángel Peralta.
A él le imputan la muerte del soldado Deylin Leonardo Treminio Peralta y lesiones al también soldado Ramón Garmendia Peralta, durante el tiroteo ocurrido el 18 de julio en la comarca de Tamalaque, Pantasma.
Peralta fue conducido a la audiencia preliminar en silla de ruedas, sin embargo, la Fiscalía —que no presentó ningún documento médico que indique a la judicial su estado de salud—, pidió prisión preventiva como medida cautelar, en vista de que existe el peligro de que el sospechoso obstaculice la investigación para conocer la verdad en cuanto a la participación de otras personas.
Pese al estado delicado de salud en que permanece el acusado, la judicial ordenó que lo regresaran a las celdas policiales.
La juez suspendió la audiencia y reprogramó su continuación para el lunes a las 9:00 a.m., bajo la orden de que el detenido pase revisión con un médico forense. Llamó la atención en la acusación de la Fiscalía las fechas en que el reo fue conducido al médico y las fechas de envío del expediente a la Fiscalía.
Señala que fue conducido el 20 de julio al Hospital Victoria Mota, de donde fue remitido al Hospital Antonio Lenín Fonseca de Managua, bajo custodia, por tanto el Cenidh considera que ha permanecido bajo arresto.
Sin embargo, la acusación dice que fue puesto a la orden de la Fiscalía hasta el pasado 26 de julio, cuando la ley establece 48 horas.
El director jurídico del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, Gonzalo Carrión, ha insistido que dadas las circunstancias la detención de Peralta es ilegal.
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