AFP
Rusia ha fabricado una parte de los misiles suelo-aire S-300 destinados a Siria pero su entrega, prevista para 2013, ha sido aplazada hasta 2014 pese a que Damasco ya ha pagado un adelanto, informa este viernes el diario Vedomosti.
Según el diario, que cita informes de las empresas fabricantes de armas rusas, una parte del pedido ya está listo pero sigue retenido en Rusia pese a que Siria ha efectuado el pago de varios centenares de millones de dólares. El contrato para entrega a Siria de cuatro complejos de S-300 por 1.000 millones de dólares se concluyó en 2011.
El 4 de junio pasado, el presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró que Moscú no había entregado “por el momento” S-300 a Siria para “no romper el equilibrio de fuerzas” en el conflicto del régimen del presidente sirio, Bashar Al Asad, con los rebeldes. El viceprimer ministro sirio, Qadri Jamil, declaró a finales de julio durante una visita a Rusia que los acuerdos de entrega de misiles S-300 siguen “vigentes”.
La entrega de estas armas capaces de interceptar en vuelo aviones o misiles guiados, un equivalente ruso de los Patriot estadounidenses, preocupa en particular a Israel, que teme que puedan caer en manos del movimiento chiita libanés Hezbolá, aliado de Damasco.
La instalación de un sistema de defensa suelo-aire de este tipo complicaría el proyecto de Estados Unidos o de sus aliados de efectuar eventuales ataques aéreos, establecer una zona de exclusión aérea en cielo sirio o intervenir para proteger o desmantelar armas químicas.