Josué Bravo
Corresponsal / Costa Rica
Industrias Infinito, la empresa minera canadiense que pretendió extraer oro a cielo abierto cerca del río San Juan, confirmó una cuantiosa demanda que supera los mil millones de dólares en contra del estado costarricense, tras haber vencido un periodo de negociaciones.
La vocera de la empresa, Yokebec Soto, explicó que la demanda será de 1,092 millones de dólares ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), organismo del Banco Mundial; alegando incumplimiento de contrato de parte de Costa Rica a una concesión otorgada a la empresa para extraer oro en Crucitas, cerca de la frontera con Nicaragua.
Según Soto, la demanda va porque Costa Rica no respondió para negociar con la empresa en un periodo de seis meses vencido esta semana, en el cual se pudo llegar a un arreglo dentro del Tratado de Inversiones entre Canadá y este país.
El cuestionado proyecto minero Crucitas quedó literalmente sepultado dentro del marco judicial costarricense, luego que la Sala Cuarta Constitucional, en junio anterior; rechazó un recurso de inconstitucionalidad contra fallos judiciales que le anularon permisos ambientales para extraer oro cerca de la frontera con Nicaragua.
El recurso había sido planteado por Juan Carlos Hernández Jiménez y Federico Sosto López, apoderados especiales judiciales de la empresa canadiense, el cual iba en contra del fallo del el Tribunal Contencioso Administrativo, que a finales del 2010 anuló los permisos ambientales a favor de esta minería.
El fallo del Tribunal fue refrendado un año después por la Sala Primera de la Corte.
Aunque los permisos ambientales otorgados a la minerías fueron anulados por el Tribunal, aún hay investigaciones y causas penales abiertas contra funcionarios y ex funcionarios responsables de avalar a Crucitas, entre ellos el ex ministro de ambiente Roberto Dobles y el ex presidente Oscar Arias.
Para Soto, esta cuantiosa demanda será la mayor en la historia del país, la cual pudo evitarse si el gobierno hubiera llegado a un arreglo, algo imposible debido a los dictámenes judiciales que cerraron el caso.
El monto fue calculado por las inversiones realizadas y las ganancias que no percibieron.
El Ministro de Ambiente, René Castro, dice que el país no ha sido notificado sobre alguna demanda y reconoció el derecho de cualquier empresa de reclamar ante instancias internacionales.
La empresa canadiense Industrias Infinito, pretendió extraer alrededor de un millón de onzas de oro en Crucitas, ubicada a unos tres kilómetros del río San Juan.