WASHINGTON/AFP
El secretario del Tesoro, Jacob Lew, expresó ayer a la cadena CNN que “a partir del 17 no podremos pedir prestado y el Congreso juega con fuego”. Mientras que en la ABC, el jefe de los republicanos en la Cámara de Representantes, John Boehner, afirmó: “No vamos a pasar un aumento del límite de la deuda”, en el sexto día de cierre administrativo por el bloqueo presupuestario.
“Nunca estuvimos en la situación de que Estados Unidos funcionara sin la capacidad de obtener préstamos. Es muy peligroso. Es irresponsable porque la realidad es que no hay opción si no podemos pedir prestado y nos quedamos sin liquidez. Esto significaría que por primera vez, desde 1789, Estados Unidos dejaría de pagar sus facturas a causa de una decisión política”, explicó Lew.
Sin un acuerdo, EE. UU. podría entrar en moratoria por primera vez en su historia. El tope de endeudamiento, que se alcanzó en mayo, es de 16.7 billones de dólares y el déficit mensual ronda los 60,000 millones de dólares, que deben ser obtenidos en los mercados financieros.
Interrogado sobre la eventual decisión unilateral del presidente Barack Obama para impedir el cese de pagos, Lew respondió que “el presidente no tiene autoridad para actuar de este modo. El presidente consultó a sus juristas y esa es su conclusión”.
Boehner manifestó que los problemas de fondo deben de ser abordados antes de aumentar el límite de la deuda. Señaló que en las presidencia de George H. W. Bush y Bill Clinton se alcanzaron compromisos presupuestarios a cambio del aumento del techo legal de la deuda.
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