En menos de un mes, José Ariel Contreras llegará a 42 años de edad. Debería entonces, estar concentrado en sus proyectos más allá del terreno de juego. En lugar de eso, aún está sobre un montículo y se siente tan bien, que no tiene previsto salir de ahí pronto.
La última vez que Contreras vino a Nicaragua, por poco no sale, sino hasta que se probó que una gruesa cantidad de dólares que pagó en impuestos, fue recuperada e ingresada al tesoro nacional.
“La forma como me han tratado en Nicaragua ha sido especial y no me detengo a pensar en esa situación, sino que pesa más el cariño y afecto que los aficionados siempre me han expresado”, dijo.
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“No tengo porqué estar pensando en mi retiro si aún puedo lanzar la bola a 94 millas por hora. Me siento muy bien y aunque por ahora no sé dónde lanzaré en el 2014, sé que lo haré en algún lado”, dice el cubano con convicción pero sin alarde en sus palabras.
Contreras provocó un impacto en el beisbol mundial, tras desertar de la selección de Cuba en 2003 y firmar con los Yanquis de Nueva York un contrato por 32 millones de dólares. Y aunque no ha sido una estrella, tampoco ha pasado inadvertido en el juego.
“Tardé en adaptarme un poco y quizá no se tuvo paciencia conmigo, pero estoy contento con lo que el beisbol me ha dado. Fui a una Serie Mundial y la ganamos. Mis finanzas están bien, pero aún deseo lanzar. Pienso que puedo hacerlo todavía”, asegura.
Por ahora Contreras lanza para los Tigres de Licey en el beisbol invernal de República Dominicana. Su marca de 0-1 y 5.19 sugiere que es tiempo de irse, pero sus últimas dos salidas y sus 17 ponches en 17.1 innings, indican que vale la pena tratar de seguir.
“Mi brazo está muy bien. Mis dificultades han sido en la espalda, pero en Dominicana he encontrado un médico especialista en acupuntura y los dolores han desaparecido. De modo que me prepararé bien para ver qué sucede en el 2014”, dice con mucha fe.
Contreras lanzó por última vez en las Mayores el 7 de mayo de este año con los Piratas, y tras verse afectado en su control (4bb en un tercio de inning) fue dejado libre. Antes lanzó con los Yanquis, Medias Blancas, Rockies y Filis a través de 11 campañas.
“Mi deseo es volver a las Grandes Ligas, pero también estoy listo para lanzar en Japón, Corea, Taiwán, Cuba o Nicaragua. Lanzaré donde sea, pero lo haré. Cuando sienta que no puedo, yo mismo me iré”, señala el tirador de Las Martinas, Pinar del Río.
Este año, Contreras regresó a Cuba después de una ausencia de diez años y le gusto ver que el cariño de la gente hacia su persona está intacto. Igualmente planea volver pronto a Nicaragua, país que considera su segunda patria y por el que siente gran afecto.
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