Seúl/EFE
Corea del Sur ha celebrado el acuerdo para congelar temporalmente el programa nuclear iraní, en una maniobra que espera pueda ejercer presión sobre Corea del Norte para que regrese a las negociaciones orientadas a detener su desarrollo de armas atómicas.
“Celebramos que el Grupo 5+1 e Irán hayan llegado a un primer acuerdo para resolver el asunto del programa nuclear iraní”, indicó el Ministerio de Exteriores surcoreano en un comunicado.
Además, el pacto con Irán “tiene un gran significado para Corea del Norte al ejercer presión sobre el país comunista, que sigue aferrado a la opción nuclear”, declaró, por su parte, un alto funcionario del Ministerio de Exteriores de Seúl a la agencia local Yonhap.
Irán y los integrantes del Consejo de Seguridad de la ONU (EE.UU., Gran Bretaña, Francia, Rusia y China) más Alemania sellaron en la víspera en Ginebra un histórico acuerdo con Irán que congelará el programa nuclear del estado persa durante seis meses.
A lo largo de este tiempo, se suavizarán las sanciones impuestas a Teherán y las partes intentarán llegar a un acuerdo global y definitivo para poner coto a las aspiraciones nucleares del país.
“Esperamos que el acuerdo se aplique plenamente y resuelva los problemas nucleares de Irán de una manera integral y completa”, indicó en su comunicado la cancillería surcoreana, que prometió participar activamente en los esfuerzos de no proliferación de la comunidad internacional.
Corea del Norte reafirmó este año su objetivo de convertirse en un país poseedor de armas nucleares como estrategia de disuasión ante la amenaza a su seguridad que, según mantiene, plantean Corea del Sur y EE.UU.
El diálogo a seis bandas orientado a la desnuclearización norcoreana, en el que participan las Coreas, EE.UU., China, Japón y Rusia, se encuentra estancado desde 2008.
Actualmente los representantes de los países miembros de este proceso de negociaciones han mantenido encuentros para tratar de revitalizarlo, aunque de momento no se han logrado avances significativos.