Mientras en Nicaragua las autoridades hacen planes con base en los beneficios que generará al país el Gran Canal que el empresario chino Wang Jing ha prometido construir en los próximos cinco años, en Panamá la experiencia en el manejo de una obra similar les proporciona, a representantes de distintos sectores, la certeza de que en ese plazo es imposible construir una obra de esa magnitud.

Ortega llama vendepatrias a quienes votaron contra reformas