Si eres de los que crees que tu mundo no puede caber en un smartphone, hay que pensarlo nuevamente.
Cada vez es más común y necesario utilizar un teléfono para actividades cotidianas como revisar el correo electrónico o comunicarse con amigos y familiares.
En marzo de 2013, Facebook y la firma de analistas IDC realizaron un estudio denominado Always connected (Siempre conectados), que buscaba establecer la relación entre los smartphone y las actividades sociales.
Uno de los hallazgos más relevantes del estudio es que las personas están usando cada vez menos los smartphones como teléfonos; solamente el 16% del tiempo de uso es empleado para realizar llamadas telefónicas.
Otras actividades como navegar en internet y revisar el correo electrónico marcaron más del 70% del tiempo de uso y los juegos alcanzaron el 60%.
EQUIPOS ADAPTADOS A NUEVOS COMPORTAMIENTOS
Como resultado del cambio en los patrones de uso, los fabricantes de dispositivos móviles han tenido el reto de adaptar sus equipos a esos nuevos comportamientos, apostando por pantallas más grandes, con mayor resolución y calidad de imagen y por mayor durabilidad en la batería.
La firma surcoreana LG Electronics ha apostado por la fabricación de equipos que combinen lo mejor de un teléfono con las propiedades de una computadora, sin que ello signifique sacrificar la “portabilidad” del aparato. Un ejemplo es el LG G2, lanzado recientemente en Nicaragua, y el G Flex, que marca una revolución en el diseño de celulares.
La comunicación móvil es ahora más visual y equipos como el LG G2 ofrece componentes claves que marcan la diferencia entre un buen y un mal Smartphone. Entre ellos se señala una cámara de 13 Megapixeles (MP) que significa un elemento indispensable para la alimentación de redes sociales o las transmisiones de vídeo a través de Skype o Streaming.
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