Un egipcio fue detenido el jueves cerca de la frontera franco-suiza en un tren que hacía el trayecto París-Venecia sospechoso de llevar explosivos, aunque en realidad transportaba una botella con GHB, la 'droga del violador'.
El hombre, de 33 años y residente en Italia, había sido puesto bajo custodia por “transporte y posesión de productos explosivos”, después de que se encontrara en sus maletas una botella cuyo contenido despertó las sospechas de las autoridades, indicó el jueves el fiscal de Besançon, Alain Saffar. Sin embargo, el análisis del contenido descartó esta hipótesis. De hecho, desde un primer momento, las autoridades adelantaron que el análisis de los productos permitieron descartar cualquier riesgo mayor.
“El producto en la botella dio positivo a las primeras pruebas de detección de sustancias explosivas”, indicó Saffar. Sin embargo, por la noche, la prefectura anunció que otros análisis más exhaustivos permitieron descartar “los riesgos de explosivos mayores”.
Finalmente, tras sucesivos tests durante toda la jornada, “el producto dio positivo a la prueba del GHB”, declaró Saffar a la AFP. Se trata de un producto de síntesis conocido como la 'droga del violador', que está prohibido en Francia.
Los agentes de la aduana sacaron al hombre del tren el miércoles a las 23H45 (22H45 GMT). La botella que transportaba, en un embalaje de aluminio y yeso, llamó la atención de los mismos.
Cuando los agentes le preguntaron sobre el contenido de la botella, el sospechoso dio “respuestas confusas”, según el secretario general de la prefectura, Joël Mathurin.
Transportaba una botella con la mención “Nitro”, lo que despertó sospechas de que se tratase de algún producto explosivo, señaló Saffar. Al ser interrogado, el hombre “afirmó que desconocía la naturaleza del producto que transportaba” consigo, explicó el fiscal.
Destacan un laboratorio móvil
Tras descender del tren, bajo el control de los agentes, en la estación de Ferrières-sous-Jougne, fue trasladado a la aduana Vallorbe, en la frontera entre Francia y Suiza, mientras el tren reanudaba su marcha.
Allí, a algunos kilómetros del centro de la ciudad, los aduaneros acordonaron una zona de seguridad de un radio de 70 metros, sin perjudicar el tráfico de la carretera RN 57, que une ambos países.
Los responsables pusieron en marcha un procedimiento NRBC (nuclear, radiológico, biológico y químico), por lo que cinco agentes de aduanas y tres gendarmes que estuvieron en contacto con el individuo y la botella que transportaba fueron puestos bajo cuidados médicos por precaución.
Los exámenes descartaron cualquier tipo de contaminación, por lo que pudieron abandonar el lugar una vez que el dispositivo de seguridad fue levantado, hacia las 20H45 GMT del jueves.
Por la mañana, se envió a un equipo de expertos en explosivos al lugar para analizar el contenido de la botella, cuya consistencia era entre líquida y sólida.
A mitad de la jornada, los especialistas solicitaron un laboratorio móvil para realizar análisis más sofisticados (precisamente el protocolo NRBC).
Una vez el vehículo llegó a su destino, se procedió a realizar toda una batería de análisis.
“Las tres primeras pruebas a sustancias explosivas dieron positivo”, según el fiscal. Posteriormente, se descartó el riesgo de que el contenido portara cualquier enfermedad infecciosa, para finalmente determinar que se trataba de GHB (gammahidroxybutirato).
En los años sesenta, el GHB, un componente natural de las células humanas, fue desarrollado como anestésico, pero en la actualidad se utiliza como droga mezclado con alcohol y se le denomina 'éxtasis líquido', aunque su efecto es depresor y no estimulante.
Un par de décadas atrás era un producto de venta libre como anabolizante.