Emiliano Chamorro
Enviado especial/El Vaticano
Para el sacerdote nicaragüense Marlon Velázquez, Dios ha vuelto a fijar su mirada en Nicaragua, con el nombramiento de Monseñor Leopoldo Brenes como Cardenal.
Para Velásquez, quien estudia Teología Dogmática en Roma, la elección del cardenal Leopoldo Brenes, es un signo de Dios para la Iglesia de Nicaragua. “Hay tantas naciones en el mundo mucho más grandes que Nicaragua, con mucha mayor cantidad de feligreses que no fueron elegidas por el papa, porque Nicaragua recibe un cardenal”.
“Yo hago una lectura, Dios se fija nuevamente en Nicaragua, Dios nos llama a tomar el Espíritu que el papa Francisco está hoy proponiendo y cuál es ese Espíritu que el papa está promoviendo, regresar a una Iglesia sencilla y misionera, pero una misión que no sea solamente fundamentalista que toca puertas para ganar adeptos, no, sino una Iglesia que ofrece el Evangelio en la alegría y la pobreza”, reflexionó el sacerdote nicaragüense.
Sobre el mensaje del papa de ayer ante los cardenales del mundo, Velásquez insistió en que sin familia formada en valores no puede haber una buena sociedad.
“En el mensaje el papa retoma ese concepto tan tradicional que nosotros tanto hemos hablado en la Teología, familia como célula de la sociedad, como la estructura fundamental sin la cual no hay una buena cultura en la sociedad sin la cual el ser humano no puede vivir, desde el más pequeño hasta el más pobre hasta el más rico”, expreso el sacerdote nicaragüense, quien realiza estudios en la Universidad Gregoriana de Roma.
LA FAMILIA UN REFLEJO DE DIOS
El papa Francisco reunido con todos los cardenales del mundo durante la celebración del consistorio volvió a reflexionar sobre la importancia de la familia humana.
“En estos días reflexionaremos de modo particular sobre la familia, que es la célula básica de la sociedad humana. El Creador ha bendecido desde el principio al hombre y la mujer para que fueran fecundos y se multiplicaran sobre la tierra, así, la familia representa en el mundo como un reflejo de Dios, Uno y Trino”, reflexionó el Santo Padre a los Cardenales.
El papa dijo que la familia y el matrimonio vive realidades de alegrías y esperanza, de fatigas y sufrimientos, sin embargo dijo que la Iglesia siempre está presente para ayudar a esas familias, que viven con esas realidades.
“Hoy la familia es despreciada, y es maltratada y lo que se nos pide es reconocer lo bello, auténtico y bueno que es formar una familia, ser familia hoy, lo indispensable que es para la vida del mundo, para el futuro de la humanidad. Se nos pide que realcemos el plan luminoso de Dios sobre la familia”, reflexionó el papa en el Aula Pablo VI, ante los Cardenales.