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Martha Vásquez
Marlon Briceño, uno de los extrabajadores de la empresa Inversiones Almori SA propiedad de Álvaro Montealegre, relató ayer cómo se venía manifestando la crisis financiera en dicha empresa, al punto que cuando llegaba el día de pago, el gerente elegía de la planilla a quiénes les pagaría, mientras el resto esperaba ser favorecido a la siguiente quincena.
“Yo pasaba la planilla completa, pero el gerente decidía a quién pagar. Casi siempre se elegía a los que ganaban menos”, reiteró Briceño, quien se desempeñaba como encargado de planilla en dicha empresa.
Briceño dio su testimonio durante la audiencia única, celebrada ayer en el Juzgado Primero Distrito Laboral y de la Seguridad Social de Managua.
Inversiones Almori SA enfrenta una demanda de veinte trabajadores por más de cuatro millones de córdobas por pago de indemnización, salarios caídos, vacaciones, aguinaldo, multas por atraso de pago de salarios y aguinaldos. Además, el pago de subsidio pre y posnatal de dos trabajadoras que se encontraban embarazadas al momento del cierre de la empresa.
Helga Hasher, abogada de Montealegre, reconoció que la empresa le debe a los trabajadores, pero no la cantidad que dicen en la demanda, y que no puede ofrecer pago porque todos los bienes y acciones de Álvaro Montealegre están embargados por orden judicial, por procesos que enfrenta en la vía penal.
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