Para el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, las telenovelas incitan a la violencia y el odio en la sociedad por lo que se va a debatir sobre el contenido de los medios de comunicación.
Por casualidad, ¿se lo habría aconsejado el pajarito chiquitico?
Por otra parte anuncia la creación de una nueva institución para combatir el desabastecimiento y designa al vicepresidente Jorge Arreaza, jefe del Estado Mayor Especial de Abastecimiento. Con la creación de un mapa completo de la distribución y comercialización de los productos que circulan por el país tendrá la misión, las 24 horas del día, de afinar todos los mecanismos de seguimiento para combatir la escasez de bienes básicos.
Con la aprobada ley de “precios justos” y con el argumento de que la “economía se enfermó de especulación”, Maduro hace un llamado a los que quieren “patria” para el cumplimiento de la ley. Y para “mantener el ritmo de la revolución y avanzar en el fortalecimiento de la patria” ha nombrado 32 ministros y 111 viceministros. ¡Tremendo gobierno!
Es que Nicolás Maduro está en guerra. Es la guerra económica en la que los anaqueles vacíos de los supermercados han sido el arma mortífera en el campo de batalla de los enemigos para producir la quiebra del país.
Por eso en la guerra no puede quedar fuera la ministra de Defensa, Carmen Meléndez, que dice que hay grupos por ahí embochinchando el país y advierte que “en todas las batallas que se nos presenten vamos a seguir con la independencia que jamás nos quitarán”.
Por supuesto, Diosdado Cabello no puede quedar fuera del escenario y hace su entrada triunfal en la televisión con su programa “Con el mazo dando” en la que hizo honor al nombre del programa y en el que al final y, de repente, se apareció Nicolás Maduro.
Dice Maduro que el plan para llenar de sangre a Venezuela es financiado desde Miami. Se activa el comando antigolpe. ¿Y no se supone que Miami ha sido “conquistado” por los cubanos? (Sin duda el mayor éxito del comandante). O sea, ¿tienen los cubanos anticastrista un plan para llenar de sangre a Venezuela? Sin embargo, el canciller Elías Jaua afirma que las recientes protestas en Venezuela son financiadas y siguen instrucciones desde Washington.
Agrega el presidente, también haciendo honor al nombre del programa, que los dirigentes de la oposición “no tienen pantalones”. ¿Andarán en calzoncillos? “Aquí va a haber mano de hierro con conspiradores y fascistas”.
Al parecer el mazo de Cabello le queda chiquitico a la mano de hierro de Maduro.
Es que Nicolás Maduro tiene un problema. Está “homeless”.
Resulta que, como presidente, Maduro no ha podido tomar posesión de la residencia presidencial, lo que por ley le corresponde, porque la Casona sigue ocupada por las infantas del rey San Hugo Chávez. ©FIRMAS PRESS. Santo Domingo.
La autora es periodista y escritora dominicana.
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