Las muertes prematuras y los problemas de salud causados por la contaminación atmosférica le cuestan hasta 300 mil millones de dólares anuales a China, según un informe del Banco Mundial, que aboga por un nuevo modelo de urbanización en la segunda economía mundial.
Cada año mueren 500 mil personas y los bebés y los niños se ven gravemente afectados por las partículas tóxicas, con riesgos crecientes, además, de malformación para los futuros niños aún no nacidos, advierte el informe.
Ver en la versión impresa las páginas: 3 C