Tania Sirias y Gloria Picón
Como una decisión acertada calificaron políticos el hecho de que la Iglesia católica pospusiera el diálogo con el Gobierno.
[/doap_box]
Sin embargo, algunos miembros de la clase política consideran que los obispos de la Conferencia Episcopal de Nicaragua no harán más que dar legitimidad a las acciones del presidente inconstitucional Daniel Ortega, quien sacará réditos de este encuentro.
Para el diputado del Movimiento Renovador Sandinista (MRS), Víctor Hugo Tinoco, el hecho de que Ortega dialogue con los obispos no es señal de cambio.
Tinoco indicó que los motivos de la postergación están explícitos, ya que se hizo una valoración, y se vio que no era apropiado hacer ese encuentro, cuando está muy reciente la elección fraudulenta de funcionarios públicos.
“Ese diálogo sigue siendo importante, ya que significa otra oportunidad más para Ortega de rectificar, de que en el país no tenemos elecciones libres, ni tampoco un Consejo Supremo Electoral creíble”, dijo Tinoco.
Carlos Noguera, del Movimiento Liberal Constitucionalista Ramiro Sacasa Guerrero, dijo que esta postergación del diálogo permitirá hacer un análisis más profundo sobre la elección de cargos públicos, donde quedó asentado que Ortega no tiene ningún interés en hacer cambios en la estructura de los poderes del Estado, y mucho menos que mejore el concepto de gobernabilidad.
Show mediático
En la opinión de Noguera, lo que Ortega pretende es simplemente hacer el show mediático. “El solo hecho de sentarse con ellos (los obispos), llamar a los medios oficialistas y salir sonriendo, le sacará el mayor rédito político y sentirse legitimado”, expresó Noguera, quien insistió que cuando se dan situaciones como la elección de funcionarios, no se ve un clima favorable para un diálogo entre Ortega y los obispos.
Ver en la versión impresa las páginas: 9 A