No hay expresiones formales que indiquen Nicaragua está siendo utilizada en un juego geopolítico, dice Valle.
Félix Maradiaga también es de la idea de que mientras no haya por parte de la cancillería nicaragüense o por parte de las autoridades rusas indicios de que hay algún tipo de proceso en marcha —que indique que hay otro interés de Rusia sobre Nicaragua— no habría mayor preocupación.
“Conozco las relaciones, me preocuparía si fueran relaciones nuevas, siempre hubo con Rusia relaciones cercanas, siempre hemos tenido relación militar técnica muy estrecha”, insistió Maradiaga.
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Gloria Picón Duarte
Mientras José Luis Velásquez, exembajador en la Organización de Estados Americanos (OEA), es de la opinión de que Nicaragua mantiene una política exterior clientelista con Rusia, país que tiene pretensión de reactivar la Guerra Fría, analistas como Félix Maradiaga y el catedrático Alfonso Valle indican que lo que se ve son relaciones normales.
Velásquez indica que las pretensiones de Rusia le brindan a Nicaragua una oportunidad de poderse incorporar como un Estado cliente por las ventajas geopolíticas, y de esta manera obtener una serie de recursos y protección. “Esos son los términos en que está planteada la política exterior, buscar un nuevo patrón”, dijo Velásquez.
Agencias de comunicación rusas han informado en distintos momentos sobre el interés de Rusia de instalar bases militares en Nicaragua, así como de instalar sistemas de monitoreo satelital.
“Los rusos están regresando a su antigua política (…), una posición de confrontación, que le permite (a Vladímir Putin) fortalecer liderazgo en Rusia y acopiar más recursos. Nicaragua le ofrece a la política de Putin una serie de ventajas, y por eso se vuelve importante en el escenario de una nueva situación de tensión, como la que ha habido entre Estados Unidos y Rusia por el asunto de Crimea”, indica Velásquez.
Félix Maradiaga, exsecretario general del Ministerio de Defensa, indica que las relaciones que se están desarrollando entre Rusia y Nicaragua en el campo técnico militar son hasta ahora las que se han desarrollado incluso en la década de los noventa por razones técnicas, ya que el equipo militar nicaragüense es de fabricación rusa, y en ese sentido no tendría que haber alarma.
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