14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

En la comunidad de Aranjuez hay más de 120 plantas medicinales identificadas. Solo se usan 15. LA PRENSA/ A. MORALES

Farmacias de patio

Trece habitantes de la comunidad de Aranjuez cultivan plantas medicinales para su consumo personal tras la idea que les planteó la médico naturista Gloria Corrales, preparada en México. Los productores también intentan vivir de estas plantas que sanan.

Amalia Morales

[email protected]

Hasta los 20 años Ventura Rodríguez vivió mal de los riñones. Nada, ninguna pastilla, ningún tratamiento de los que le aplicaron de niño lo curó de esa dolencia hasta que dio con la planta cola de caballo, que crece en abundancia en el patio de su casa en la comunidad de Aranjuez, en Matagalpa.

Rodríguez, de 50 años, dice que con la cola de caballo no fue una sola toma y ya, como pasa con las pastillas que se toma una y se le quita el dolor. Con el té de cola de caballo la curación ha sido un proceso efectivo. “La medicina natural cura, pero toma su tiempo”, explica Rodríguez quien en su patio cultiva dos variedades de cola de caballo.

Dice que las dos tienen el mismo poder curativo, pero en una de ellas, que también es ornamental por su flor de hilachas amarillas, parecida la cola de un caballo, no se usa el tallo en la cocción.

“Es tóxico”, aclara Gloria Corrales, médico naturista de la comunidad, que años atrás llegó con la idea de crear estos viveros medicinales en la comunidad, y la idea no ha dejado de crecer en el patio de Rodríguez y de una docena de mujeres y hombres que optaron por cultivar plantas con fines medicinales. Al principio fueron 35, al final quedaron siete y después cuatro. Con esa semilla empezaron a reproducir los “jardines botánicos” en la comunidad, como les llama Ventura.

Aranjuez es una comunidad de 1,500 habitantes repartidos en siete sectores y en unas 40 casas que sobreviven en lo que fue un sanatorio de tuberculosos. Allí, muchos de sus pobladores como Ventura han descubierto dos bondades de sus patios: se curan ellos mismos y sus familias y dejan de correr por una gripe o una tos a un centro de salud donde casi nunca hay medicinas, pero también representan un ingreso adicional.

[doap_box title=”Poderoso antigripal” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]

La mezcla de eucalipto, zacate de limón y jengibre, es un antigripal que ha tenido éxito no solo en la comunidad de Aranjuez, a 142 kilómetros de la cabecera departamental de Matagalpa, sino también en otras zonas.

El antigripal que se empaca bajo el sello de montaña verde lo venden en otras partes del país como Matagalpa y Managua. Gloria Corrales, médico naturista, dice que ese producto procesado tiene mucha demanda.

Maritza Sobalvarro dice que eso le ha dado a su hijo de seis años que perenne caía con pulmonía. También lo ha mejorado con baños de rondana, menta y zacate de limón. “Me lo tenían torturado en el hospital”, canalizado, explica, pero con estos baños sus poros fueron liberando la infección.

Plantar, cortar, secar, embolsar y etiquetar los paquetes que se venden bajo el sello de Montaña Verde, es el trabajo de las mujeres dueñas de patios medicinales.

Corrales dice que a veces les hacen pedidos de diferentes plantas y para darle oportunidad a todos, se distribuyen las plantas; una provee de cola de caballo, otra de manzanilla, y así todas obtienen ingresos.

Sobalvarro ha llegado a ganar hasta mil córdobas en una semana por la venta de hojas secas de plantas medicinales. También ha participado en ferias, donde ha intercambiado experiencias y ha aprendido más sobre el uso de las plantas y las contraindicaciones,

[/doap_box]

“Es como tener una farmacia en el patio”, le dijo una mujer con epilepsia a Corrales, quien cuenta que en los montes de esa comunidad crecen muchas plantas con potencial medicinal.

Corrales cuida un vivero en el que tiene sembradas plantas como llantén, china silvestre cuyo té sirve para calmar a los niños hiperactivos. También se puede usar para bajar la bravura de las vacas.

Corrales, quien estudió en la universidad de Morelia, México, medicina natural y que reside desde hace más de 30 años en Aranjuez, cree que vive en un paraíso de medicina natural.

“Las que nosotros trabajamos que están comprobadas y conocidas son de 10 a 15, pero aquí hay un potencial aproximado de unas 120 plantas; el helecho macho, los tipos de cuculmeca, las karawalas, todas esas están ahí pero no las procesamos. Aquí trabajamos todavía de manera muy rústica”, dice Corrales, y explica que nacen dos tipos de cuculmeca en la zona, una roja que ayuda a elevar los glóbulos rojos y otra más pálida que es antiparasitaria.

Para el que no sabe de plantas, el patio de Ventura Rodríguez puede parecerle un predio con maleza, que se debe podar, sin embargo, Rodríguez dice que todo lo que hay ahí tiene una función curativa.

El matorral de melisa que fácil se confunde con una mata de hierbabuena, suelta un olor sabroso por las tardes. Dice Rodríguez que unas hojas de té de melisa son relajantes.

A la par de las colas de caballo hay un arbusto de menta y zacate de limón. Rodríguez dice que ha dejado el café —rubro principal en esa zona de Nicaragua— por el té de zacate de limón. Más allá de las mentas tiene cultivada estevia, un endulzante natural que en algunos países se está industrializando para satisfacer la demanda de los diabéticos.

“No es aromática pero sí tiene sabor. Es bien dulcita”, dice Rodríguez y explica que una vez la hoja madura, cuando se amarilla, se le va el azúcar.

EXPERIMENTAR Y VENDER

“Vivo experimentando con mis plantas y le he notado todas las cosas a las plantas… ella tiene un tiempo de poderlas cortar y de darle un secado adecuado, porque si la deja que se moje pierde”, explica Rodríguez y para honrar su conocimiento sobre la planta dice que “tres hojas de estevia” son suficientes para endulzar una taza de café.

Rodríguez aprovecha la visita de Corrales para pedirle etiquetas. Las necesita porque algunos visitantes interesados en comprarle plantas de su vivero le preguntan sobre los usos y las contraindicaciones de las plantas, porque como cualquier medicina tienen sus dosis, explican los expertos.

En este caserío, inmerso en la reserva natural cerro El Arenal que abastece del 50% del agua potable a Matagalpa, la gente ha estado acostumbrada a vivir del cultivo de café, pero también de flores, algunos están intentando vivir de las plantas medicinales.

“Se venden. El combo incluye plantas y capacitación. Aquí la medicina natural ha tenido impacto porque enseñamos sus usos, ventajas y desventajas y los procesos, sus contraindicaciones. Seguimos educando a las personas en lo que no se debe hacer”, dice Corrales.

Las contraindicaciones abarcan sobre todo a los niños menores de 5 años y a las mujeres embarazadas.

DOSIS DIFERENTES PARA CADA CASO

La médico explica que no todas las plantas naturales curan a todos en las mismas dosis. Recuerda el caso de una mamá que tenía dos hijos asmáticos y los curaba con dosis y plantas distintas. Menciona también que hay una planta conocida como “mozote de clavito” que en tintura sirve como insulina natural.

En el vivero de Corrales se ha creado un secador rústico, con plástico grueso transparente y madera, donde las mujeres llevan a secar sus hojas y luego las empacan. De allí las llevan a vender a Matagalpa, a ferias o esperan algunos pedidos. Aunque no está en auge, cada vez son más los convencidos de cultivar plantas que sanan.

“Nuestros abuelos con eso se curaban, aquí nadie se aparecía con un rayos x. Cuando yo me estaba curando de los riñones con cola de caballo y no tenían hojas, cortaban las yucas y las ponía a cocer, y viera qué rica”, recuerda Rodríguez, un hombre con una curiosidad insaciable que ha creado su propio secador de hojas, un cuartito estrecho que espera mejorar en los próximos días.

Reportajes Botánica Naturistas archivo

Puede interesarte

COMENTARIOS

  1. Hace 9 años

    aranjuez es un citio historico medicinal y mas que medicinal

  2. ProMedicinaNatual
    Hace 10 años

    Que Nicaragua sea ejemplo de un sistema de salud sin lucros económicos. Aportemos salud a la personas con plantas naturales que verdaderamente curan y no manipulemos la ciencia en favor de la industria farmacéutica, la cual ha matado más gente que todas las guerras juntas. La industria farmacéutica comete magnicidio todos los días. No permitamos que esto continúe en Nicaragua. Seamos los primeros en defender la vida humana.

  3. ProMedicinaNatual
    Hace 10 años

    La industria farmacéutica es el problema y la causa de millones de muertes en el mundo. La medicina sintética no cura y está científicamente demostrado. Los médicos recetan tóxicos que matan. Es un negocio sanguinario que deja grandes ganancias a sus dueños. Todos somos cómplices de las muertes que produce la industria farmacéutica. Pidamos la prohibición de la venta de fármacos que matan, cerremos las farmacias, y apoyemos verdaderos estudios científicos en pro de la medicina natu

  4. ProMedicinaNatual
    Hace 10 años

    Por otro lado, los hospitales atentan contra la salud pública. Son criaderos de super- bacterias a través del uso indiscriminado de antibióticos. El peor error que comete un enfermo es visitar un hospital. Todos los hospitales en todas partes del mundo están contaminados de bacterias persistentes a los antibióticos. Los estudios científicos de la salud deben enfocarse en las plantas naturales, sin manipularlas, y que cada persona se cure en su casa. No negociemos con la salud de la gente.

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí