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[/doap_box][doap_box title=”El censo y la ruta final” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]
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Rezaye Álvarez M.
La presencia de simpatizantes del FSLN en la consulta realizada ayer en Managua sobre el proyecto del Canal Interoceánico evidenció la poca tolerancia hacia los cuestionamientos relacionados con el megaproyecto.
“Nosotros escuchamos con todo respeto a todo mundo, incluso aquellos que son críticos los escuchamos con todo respeto. Creo que mayor expresión de la verdadera democracia no existe, todo mundo opina lo que considera, pregunta lo que quiere”, fueron las palabras de Telémaco Talavera, vocero de la Comisión Técnica Asesora del Canal, sobre el proceso de consulta; sin embargo, la actitud confrontativa de miembros de la Juventud Sandinista y simpatizantes del FSLN demostró lo contrario.
Las ciudadanas Tania Romero y Soraya Gutiérrez, integrantes de la organización Guerreros por la Democracia, increparon directamente a Talavera sobre lo que establece la Ley 840, ley de la concesión del Canal, lo que generó que miembros del FSLN, les gritaran: “¡Váyanse! ¡Fuera!”, mientras Talavera intentaba responder al cuestionamiento.
El acoso de algunas simpatizantes sandinistas fue tal, que aún cuando se disolvió el intercambio entre Romero y Talavera, estas siguieron gritando ¡Váyanse! con actitud amenazadora.
Una vez desintegrado el grupo alrededor de Talavera y Romero, los simpatizantes del FSLN se hicieron “la foto del recuerdo”, con Talavera al centro.
ES FERIA INFORMATIVA, ESTO NO ES CONSULTA
Al inicio de la consulta, un grupo de ciudadanos, representantes de organizaciones ambientalistas, entregó a Laureano Ortega, hijo del presidente inconstitucional Daniel Ortega, una carta donde “solicitan de manera formal los estudios técnicos ambientales y sociales realizados que respaldan las decisiones anunciadas a la fecha”.
Según Víctor Campos, subdirector de Centro Humboldt, la carta además fue enviada a Ortega y a Wang Jing, dueño de la concesión del Canal, y como organización se comprometieron a “hacer una revisión técnica exhaustiva”.
Para Campos, más que una consulta, lo realizado por HKND ayer fue “una feria informativa, porque una consulta debe cumplir con ciertos requisitos, como tener los documentos de previo. Ojalá el Gobierno arranque en corto un proceso verdadero de consulta y se pueda establecer una diálogo de doble vía”, apuntó.
Por su parte, Mónica López Baltodano, de la fundación Popol Na y abogada ambientalista, manifestó que “esta no es una consulta, me sorprende que vuelven a presentar la misma información, creemos que no cumplen ni con los parámetros nicaragüenses, ni con los internacionales de lo que es una consulta”.
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