Humberto Galo Romero
La importación de frijol rojo proveniente de Etiopía y con destino hacia Honduras ha desatado críticas para el gobierno de ese país, y ha suscitado suspicacias en Nicaragua, donde el Gobierno también compró grano etíope.
Reportes periodísticos publicados esta semana en Honduras señalan la “desaparición” de un barco que llevaría a ese país un cargamento de 40,000 quintales de frijol rojo y se señala que la empresa naviera encargada del traslado, estaría basada en Nicaragua.
El pasado 3 de julio el Instituto Hondureño de Mercadeo Agrícola (IHMA) abrió una carta de crédito a través de Banco Ficohsa con la compañía GSI Trading Inc., la cual posee operaciones en la región centroamericana basadas en Nicaragua, cuyo director ejecutivo es Jorge Granera, reseña el portal electrónico del diario El Tiempo.
Dicho medio cita declaraciones del ministro de la Secretaría de Desarrollo Económico (SDE), Alden Rivera, en las cuales señala que la naviera “es muy grande y con una gran reputación que ha atendido necesidades en Panamá, Nicaragua, Costa Rica y en toda América Latina; decidimos trabajar con ellos, porque eran los que nos ofrecían la posibilidad de llegar de manera más rápida a territorio hondureño con el frijol”.
Pero según la publicación, los plazos de llegada del frijol no se cumplieron y el Gobierno de Honduras no descarta proceder judicialmente en contra de la naviera.
De acuerdo al documento sobre la carta de crédito, la empresa fue contratada para el traslado de 50 mil quintales de frijoles rojos desde el puerto de Djibouti, Etiopía, hasta Puerto Cortés, Honduras.
LA PRENSA intentó contactar a Jorge Granera vía telefónica, pero no fue posible.
¿AQUÍ SIGUE GUARDADO?
Mientras en Nicaragua, la crisis del frijol persiste, ya que la libra del grano ya cuesta entre 30 y 35 córdobas. Representantes del Gobierno informaron que desde el pasado 14 de julio ingresaron al país los primeros 110 mil quintales de frijol comprados también en Etiopía.
Inicialmente la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, aseguró que el objetivo de la compra era incidir en la reducción del precio que los consumidores pagan por adquirir el grano nacional.
Aunque eso se contradijo con declaraciones posteriores de Orlando Solórzano, titular del Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (Mific), quien dijo a medios oficialistas que el frijol etíope se almacenaría en las bodegas de la Empresa Nicaragüense de Alimentos Básicos (Enabas) para su posterior distribución.
Ayer, tanto comerciantes como la organización de defensa de los consumidores expresaron sus reservas sobre la afirmación de Solórzano.
Carlos Mendoza Cepeda, comerciante del mercado Mayoreo, dijo no tienen información sobre la eventual distribución del frijol etíope. “Y si acaso piensan venderlo, para cuando lo hagan ese frijol estará muy viejo y no se comercializará”, señaló Mendoza.
En tanto, Juan Carlos López, director del Centro Jurídico Social Ayuda al Consumidor, externó que esta organización ha estado atenta al proceso de compra de frijol de Etiopía, pero que hasta ahora no tiene “conocimiento fehaciente” de que el cargamento llegase al país.
“Con el tema de la importación de frijoles, nosotros hemos estado verificando a través de la página de la Organización Mundial de Comercio para saber el buque, fecha de salida y la cantidad de frijol que viene desde Etiopía a Nicaragua y no hemos encontrado ningún detalle” de esa compra, manifestó López.
Explicó que si tal como lo afirma el Gobierno, los frijoles ya están aquí, se debió mostrar un certificado de importación.
“Esto origina muchas suspicacias, al parecer no se hizo tal importación”, señaló López.
Los rumores en el mercado Oriental, según los comerciantes, es que el frijol etíope lo distribuirá Enabas, quien lo vendería al comercio a un precio de 1,500 córdobas por quintal, para así incidir en una reducción del precio actual. El precio actual del quintal de frijol rojo nacional es hasta de 2,700 córdobas.
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