Emiliano Chamorro Mendieta
Un país con democracia, respeto al relevo generacional y no más caudillismo en la clase política son parte de las demandas que decenas de jóvenes de Jinotega hacen al sistema político nicaragüense.
Jóvenes como Tamara Ruiz, Daylis Sauning, Ana Blandón y Martha María Pérez apuestan por un cambio en el ejercicio político del país, con una juventud menos indiferente y con mayor incidencia en la vida política y social.
Ellas son parte de los jóvenes que reciben el primer diplomado de liderazgo juvenil de la escuela diocesana para la formación política y jurídica, de la Diócesis de Jinotega, a cargo de monseñor Carlos Herrea, y que pretende reeditarse en otras partes del país.
Ana Blandón reclama que la clase política solo toma en cuenta a los jóvenes en períodos electorales y que faltan espacios para la formación política de los jóvenes.
Tamara Ruiz considera que a través de los diplomados de formación política, como el de la Diócesis, se pretende crear conciencia en la juventud para que no se autoexcluya y se organice para demandar espacios de incidencia.
Martha María Pérez, de Yalí, asegura que el reto de los jóvenes es trabajar por un cambio.
“Hay una resistencia al relevo generacional”, se queja Pérez, quien advierte que eso es lo que los jóvenes quieren cambiar.
Ver en la versión impresa las páginas: 6 A