Gloria Picón Duarte
“Vemos una cosa aberrante en Nicaragua, donde el representante del gran capital se encarga de divulgar apasionadamente una ley que viene con dados cargados”, expresó Báez.
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El diputado Wilber López, jefe de la bancada, cuestionó el hecho de que se tenga que castigar a los alumnos y a los maestros por la ineficiencia en el Ministerio de Educación, ya que la mayor parte del recorte a este ministerio responde a la falta de ejecución en los proyectos.
Agregó que los recortes al presupuesto no están ajustados a las necesidades del país, ya que le quitan a Educación y Salud, pero hacen gastos millonarios por el 19 de julio, donde nadie sabe de dónde salen los fondos, así como también gastos en culto a la personalidad del presidente inconstitucional Daniel Ortega.
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El recorte al Presupuesto General de la República que los diputados de la Asamblea tendrán que realizar en los próximos días responde, según explicación del especialista en Derecho Tributario, Julio Francisco Báez, a que la Ley de Concertación Tributaria no rindió debido a que tiene consigo “un mundo de exoneraciones y privilegios fiscales” y eso ha traído más inequidad.
El experto calificó las exoneraciones que se dan en nuestro país como “el sida de las finanzas públicas”. Explicó que Nicaragua ocupa el primer lugar en Latinoamérica en exoneraciones y son los asalariados los que están cargando el piso tributario.
“Eso significa que de 11,500 millones de dólares de Producto Interno Bruto (PIB), el siete por ciento del PIB, lo pierde Nicaragua subsidiando con exoneraciones, una cantidad escandalosa”, cuestionó Báez, quien participó en una reunión de carácter técnico entre los diputados de la Bancada Alianza Partido Liberal Independiente (Bapli) y el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (Ieepp).
Según el experto, las cifras de exoneraciones en nuestro país han andado hasta por un 4% del PIB.
ARGUMENTOS SON FALSOS
Entre los argumentos del Gobierno para hacer el recorte presupuestario que los diputados comenzarán a discutir esta semana, está el no haber alcanzado las metas de recaudación, la desaceleración económica, la sequía, los temblores y la falta de ejecución de proyectos en las instituciones del Estado.
Sin embargo, Báez señala que culpar a la sequía es una falsedad, porque esta no tiene ni dos meses, mientras que la Ley de Concertación Tributaria desplegó su potencial en el 2013.
“Esos problemas no existen, la desaceleración en la economía observa obstáculos recientes, no lo dice un estudio económico, sino el sentido común. Todos estamos claros que la sequía no tiene año y medio, que sí tiene la ley”, dijo Báez.
CUIDADO CON REFORMA
Báez manifestó que hay que estar atentos a una posible reforma de la Ley de Concertación Tributaria, porque “si vienen con el cuento de que la reforma va a acopiar más recursos, que expliquen ¿quién va a pagar esos recursos? Si va a ser el gran capital o si van a ser una vez más los asalariados”.
Báez explicó que los proyectos de reforma que han circulado dicen que el sector privado va por más privilegios, de ahí que el representante del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), José Adán Aguerri, dijo en una ocasión que habría reforma en 2014, 2015 y 2016.
“Está diciendo que Nicaragua es un país de inestabilidad, no hay reglas del juego claras, esta reforma que viene, cuidadito, porque en nombre de la crisis trae más privilegios, en nombre de la sequía, en nombre de los problemas sociales, trae más beneficios y si no fuera así pensemos, ¿trae más recaudación, quién la va a pagar?”, dijo el experto en Derecho Fiscal.
Báez no es partidario en este momento de una reforma tributaria, porque según lo que se ha visto ya se cae en la “glotonería fiscal”.
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