Génesis Hernández, Tania Sirias, Lucía Navas y Emiliano Chamorro
Las afectaciones por la sequía no han dejado a nadie indiferente, pero mientras el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) buscan unir esfuerzos para seguir trabajando en el tema, los diputados oficialistas la minimizan.
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Los alimentos donados por el PMA en una primera entrega consistieron en 1,400 toneladas métricas (equivalente a 30,900 quintales) de frijol rojo, arroz, maíz, cereal fortificado con micronutrientes, aceite vegetal y sal.
Sin embargo, Rauch dijo que esto no es suficiente y que “hasta el momento se calcula que se necesitan unas 35 mil toneladas métricas de alimentos” para solucionar la crisis.
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El diputado sandinista Douglas Alemán dijo que no era necesario emitir emergencia nacional por la sequía, pues no existe un problema tan serio, tomando en cuenta que el sector ganadero tiene un hato de cinco millones de cabezas y apenas dos mil reses fallecieron a causa de esto, por tanto, estadísticamente no es significativo.
“Aunque para cada uno de nosotros es importante la afectación de un problema, esto debe ser comparado con el volumen de los afectados”, sostuvo Alemán. Indicó que lo correcto sería prepararse de cara al futuro, tomando en cuenta que nuestro país se verá afectado por el cambio climático.
Sin embargo, el sacerdote Elías Barreras, director de Cáritas Nicaragua, la pastoral social de la Iglesia católica a nivel nacional y el padre Uriel Vallejos, director de Cáritas de Jinotega, lanzaron una llamada de auxilio al Gobierno central para que no dejen sufrir por hambre a familias que viven en la zona norte del país, donde la sequía ha sido fuerte.
Barreras afirmó que la situación es tan caótica que hay gente que no tiene agua ni para su consumo, menos para cultivar, mientras criticó al gobierno de Ortega de decirle al mundo que la situación económica y social del país está bien.
NO HAY AGUA NI PARA BEBER
“Hay comunidades que no tienen agua ni para beber a causa de la sequía, menos que tengan para cultivar. Hay desesperanza y el Gobierno a veces está dando una imagen a nivel de todo el mundo que estamos bien; pero me imagino que es para traer financiamiento, pero la realidad es otra, pues estamos sacrificando a nuestro país y a la gente pobre la estamos dejando que se muera de hambre”, sostiene el director de Cáritas de Nicaragua.
El sacerdote explicó que el Gobierno debe asumir con responsabilidad la crisis de la zona seca del país que golpea a miles de pobladores “antes que esto sea tarde y se nos venga un caos difícil de resolver”.
“Creo que el Gobierno debe actuar responsablemente y declarar el estado de emergencia y se recurra a la cooperación internacional”, reflexionó Barreras.
GOBIERNO SIGUE “ESTUDIANDO” QUÉ HARÁ
Pero mientras países como Costa Rica y Honduras ya declararon la emergencia en las zonas afectadas por la sequía y destinan fondos económicos para asistir a las poblaciones, en Nicaragua los funcionarios siguen diseñando el plan de contingencia para pedir ayuda económica a los organismos internacionales.
Ayer, el ministro de Hacienda y Crédito Público Iván Acosta no supo responder si el Gobierno contempla la declaración de emergencia en 107 municipios del Corredor Seco donde se perdió gran parte de la producción del subciclo de primera por falta de lluvia.
“No estoy dando seguimiento (de) quiénes han declarado (emergencia), pero lo que sé es que para nosotros es alta prioridad y le damos seguimiento desde mayo”, dijo.
¿Pero habrá una declaración de emergencia?, se le consultó.
“No me compete responder eso”, afirmó.
Acosta dijo que aún no tienen listo el Plan B de las acciones que adoptará el Gobierno para enfrentar los problemas de la desaceleración económica y de la sequía, y por tanto aún no pueden hacer una solicitud de ayuda al Banco Mundial, al Fondo Monetario Internacional, al Banco Interamericano de Desarrollo y al Banco Centroamericano de Integración Económica.
“Son temas que estamos preparando con tiempo, responsabilidad, criterios técnicos, haciendo evaluación y estudios, no son temas que uno lo suelta en 15 días. Un plan en 15 días no sería objetivo, técnico y ajustado a la verdad. El mensaje es que estamos revisando todo lo que tiene que ver con el impacto en la sequía”, dijo.
Se supone que dicho Plan B estaría concretado al final de la semana pasada, según anunció en su momento el mismo Acosta.
NO VEN NECESARIO DECRETAR EMERGENCIA
Pero los diputados oficialistas afirmaron que no es necesario que el Gobierno decrete emergencia nacional por la sequía, ya que esto significaría “suspensión de derechos y eso no siempre resuelve”, expresó el jefe de la bancada sandinista Edwin Castro aunque agregó que esta valoración le corresponderá al Ejecutivo.
Castro expresó que se deben buscar nuevos procesos de adaptación al cambio climático, ya que la sequía es un problema que está afectando a la región, “se deben buscar soluciones para los cultivos, sistemas de riego, ya que este año se han detectado violentos incrementos en la temperatura”.
De igual manera, el diputado José Figueroa comentó que las propuestas que la Asamblea presentó al Ejecutivo fueron expuestas por el diputado Wálmaro Gutiérrez, quien preside la Comisión Económica.
Una de estas propuestas fue la reunión con la Asociación de Bancos Privados de Nicaragua (Asobanp) para flexibilizar los créditos a productores de las áreas afectadas y otra fue el mejoramiento de semilla para zonas secas, por lo que esperan con eso “contribuir en algo para enfrentar los efectos de clima”, dijo Figueroa.
HAY HAMBRE EN EL NORTE
Sin embargo, aunque se lograra hacer frente a los efectos del clima, ya hay hambre en el norte de Nicaragua. “Hay gente que por vergüenza no divulga que está con hambre, que solamente se toman una taza de café y habrá muchos que se enfermarán por falta de alimentos”, dijo por su parte Barreras.
Barreras mencionó que Cáritas ya tiene un diagnóstico sobre la realidad de la zona seca en Sébaco, Matagalpa y Jinotega que presentará a organismos internacionales que cooperan con la labor social de la Iglesia católica.
“El panorama es de desesperanza y el gobierno debe actuar ya declarando estado de emergencia. Hemos constatado la crisis social de nuestra gente porque estamos con ellos en el terreno y llevamos ayuda. La emergencia se debe dar, no podemos tapar el sol con un dedo”, exhortó el padre Uriel Vallejos, director de Cáritas de Jinotega.
“Hay hambre y lo más triste es que hay una gran cantidad de niños desnutridos, también personas adultas. Tenemos fotos de ganado que ha muerto por falta de pasto”, precisó Vallejos.
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